Tiempo Argentino
El ministro de Economía, Amado Boudou, recomendó ayer a los clientes de la empresa del Grupo Clarín “esperar antes de pagar las facturas”. Y embistió contra Techint y Shell por la suba de precios en chapas y naftas.

Ayer por la tarde, un grupo de inspectores de la Secretaría de Comercio Interior concurrió a la sede de la empresa Cablevisión para verificar si el anunciado aumento del 15% a sus abonados respeta la legislación vigente. En horas de la mañana, fue el propio ministro de Economía, Amado Boudou, quien adelantó que se aplicaría la Resolución 50, que habilita a Comercio para controlar que las subas tarifarias en la TV paga respondan a aumentos de costos reales.
“El gobierno no va a permitir el aumento aplicado por Cablevisión a sus abonados”, señaló Boudou, al tiempo que pidió a los consumidores “esperar, porque vamos a llevar los precios a lo que tienen que ser”. El funcionario, que aseguró que ya fueron solicitados los esquemas de precios a la compañía de TV paga del Grupo Clarín, dejó abierta la posibilidad de que los valores vuelvan atrás, al igual que sucedió con otros casos resonantes de aumentos desmedidos, como el de chapas de Techint y combustibles de Shell. De hecho, en términos prácticos, la aplicación de la Resolución 50 equivale a la implementación de una “ley de abastecimiento” exclusiva para el cable.

 

La suba del 15%, anunciada por Cablevisión para febrero, es sólo la punta del iceberg de una serie de abusos tarifarios que subieron los valores más de un 200% desde el 2005 a esta parte, pasando el costo del abono básico de $ 47,11 a $ 126,80 en diciembre de 2010.
“Quieren aumentar sus precios para jorobar a los consumidores”, dijo Boudou, y agregó que “hay precios que los aumentan las empresas: Shell, Techint y Cablevisión son empresas concentradas con alto impacto en la economía, que están tratando de aplicar aumentos que no se condicen con las condiciones de la economía”. Respecto al caso de Techint, Comercio Interior ordenó ayer dar marcha atrás con los aumentos de precios de los productos siderúrgicos y retrotraerlos al 21 de enero último. La normativa cae de lleno sobre Ternium, del Grupo Techint, que según trascendió habría incumplido un acuerdo oficial de noviembre de 2010, al incrementar entre un 3 y 4% el costo de la chapa en frío y en caliente, cuando se habían establecido otros porcentajes para este año.
En relación con Shell, Boudou señaló que “el caso es particularmente irritante, porque en diciembre se había acordado, con el conjunto de empresas que abastecen el mercado local de combustibles, los precios para el primer semestre”, sin embargo, “Shell después avanzó con subas en las naftas y el gasoil”, y añadió el ministro que “el esfuerzo grande lo hace YPF, que atiende al 64% del mercado sin modificar los precios”.
En este sentido, el funcionario vislumbró intencionalidad en los aumentos de la siderúrgica que conduce Paolo Rocca, la petrolera angloholandesa y el Grupo Clarín.
El año pasado, el gobierno nacional había alertado de la especulación de precios de Cablevisión: un informe que la presidenta Cristina Fernández presentó el año pasado en los Estados Unidos evidenció que, tras la salida de la convertibilidad, la TV paga y el servicio de Internet subieron un 202% y un 282%. Lo preocupante es que en la Argentina hay 7 millones de hogares con TV por cable, y 3,5 millones de ese total son clientes de Cablevisión.