Politólogo, abogado, agnóstico y marxista (se autodefine de la tendencia de Groucho), el catedrático de la Universidad Nacional Juan Gabriel Gómez considera que Wikileaks está dando un ejemplo mundial de transparencia con su trabajo y por eso decidió aportarle US$75, de su cuenta de ahorros en Colmena.
Desde mediados de diciembre está intentando hacer el giro internacional, pero primero le dijeron que había diligenciado mal el formato, luego tuvo que acudir a la defensora del cliente de Colmena, después, el 21 de diciembre, le solicitaron poner por escrito los datos que ya había llenado en el formulario, y el 23 le informaron que su queja ante la defensora había sido tramitada (pero la anunciada donación no llegaba al destinatario). En la primera semana de enero se despejó la incógnita respecto a la razón para los tropiezos en la transacción: Colmena le informó que la entidad encargada de los giros internacionales se negaba a transferir los fondos.
La defensora del Cliente Financiero de BCSC (Banca Caja Social-Colmena) se declaró no competente para ese tema, porque el Banco es libre de prestar ese servicio. «Un caso diferente sería, por ejemplo, que la entidad no le permitiera a uno de sus clientes sacar el dinero de su cuenta”, dijo. Un rato después, voceros del BCSC agregaron que la entidad encargada de recibir el giro no aceptó la transacción.
Gómez está convencido de que el banco no puede censurar su derecho a hacer donaciones, a menos de que sean para delincuentes o terroristas. Y Wikileaks no lo es, ni hay condena o acusación en su contra, salvo el señalamiento del vicepresidente de EE.UU., Joe Biden, quien llamó a Assange terrorista tecnológico. Por otro lado, Paypal, Visa y MasterCard se niegan a tramitar las donaciones a Wikileaks por supuesta presión desde EEUU.
En cuanto a Colmena, Gómez cree que lo que ocurre es que le piensan negar un servicio financiero con base en una consideración acerca de su prestigio, decisión que viola la libertad de los ciudadanos y el estatuto de los bancos como servidores del público. Por eso insistirá. Cree que su caso ya es de interés público y por ello se valdría hasta de una tutela para sentar un precedente sobre el tema.