Actualidad.RT
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, aseveró que «cada país es soberano para decidir su modelo político», en referencia a las críticas de los mandatarios de Chile y Uruguay por unas declaraciones que realizó sobre Venezuela.
«Siempre he defendido la idea de que cada país es soberano para decidir su modelo político, sus cosas internas. La misma exigencia que el mundo le hace a Venezuela, no se la hace a Arabia Saudita. Es muy extraño. Quiero que Venezuela sea respetada. Quiero esto para Brasil y para el mundo entero», comentó en una rueda de prensa de la que se hace eco Globo.com.
Lula también destacó que «nadie está obligado a estar de acuerdo con nadie» y que los líderes reunidos en Brasilia no necesariamente tienen que formar «un grupo de amigos».
El lunes, víspera de la cumbre de jefes de Estado de América del Sur, Lula recibió al mandatario venezolano en la capital brasileña. «Venezuela debe mostrar su narrativa para que pueda, efectivamente, hacer que la gente cambie de opinión. Usted [Maduro] necesita construir su narrativa. Y su narrativa será infinitamente mejor que lo que ellos han estado contando de usted», comentó el líder del Partido de los Trabajadores (PT).
Y reiteró: «Está en su manos construir su narrativa y darle la vuelta a este juego, para que ganemos definitivamente, y Venezuela vuelva a ser un país soberano, donde solo su pueblo, a través del voto libre, pueda decir quién gobernará ese país».
«Tapar el sol con un dedo»
Al día siguiente, en el marco de la cumbre, los presidentes de Uruguay, Luis Lacalle Pou, y de Chile, Gabriel Boric, se mostraron en desacuerdo con las declaraciones de su homólogo brasileño.
«Debo decir que me sorprendió cuando dijo [Lula] que lo que pasa en Venezuela es una narrativa. Ya se sabe lo que pensamos de Venezuela y del gobierno venezolano», destacó Lacalle Pou.
El presidente uruguayo, por su parte, añadió: «Si hay tantos grupos en el mundo que están tratando de mediar para que la democracia sea plena en Venezuela, para que se respeten los derechos humanos, para que no haya presos políticos, lo peor que podemos hacer es tapar el sol con un dedo».
Boric, entretanto, aseguró que había manifestado «respetuosamente» sus discrepancias con Lula en relación «a que la situación de derechos humanos en Venezuela era una construcción narrativa». «No es una construcción narrativa, es una realidad. Es seria», puntualizó.
En respuesta, Lula reiteró que «desde [Hugo] Chávez tomó posesión, se construyó una narrativa en su contra». «Yo tuve la oportunidad de ver esto, una narrativa que determina que el tipo es un demonio. Desde el momento en que creas la narrativa de que él es un demonio, a partir de ese momento, comienzas a poner a todos contra él. Así pasó con Chávez, así pasó conmigo», sentenció.
Y recalcó: «Por eso le dije a Maduro que hay una narrativa en el mundo de que en Venezuela no existe democracia y que su obligación es crear una narrativa con hechos verdaderos».