La factura de la monarquía. La Zarzuela desvelará el desglose de la asignación anual que recibe Juan Carlos I incluyendo su sueldo // Los Presupuestos detallan un gasto de 25 millones, pero mantienen en secreto las partidas que pagan los ministerios de Hacienda, Interior y Defensa. A ello hay que sumar 34 millones para conservación de palacios y jardines
Redondeando, se consumieron en el ejercicio 2010-2011 unos 8,5 millones de kilovatios por hora de electricidad y otros 27 millones de gas, así como 0,2 millones de litros de agua. Se recibieron unas 700.000 llamadas telefónicas y se ingresaron hasta 1,8 millones de euros por la venta de un helicóptero que estaba en leasing. Se gastaron hace unos años unos 120.000 euros en limpiar candelabros, otros 16.800 en instalar un sistema para proteger las botellas de vino de las bodegas de palacio y otros 550.000 en convertir una sala privada de cine en un área destinada a eventos oficiales.
No, no es un desglose que aparezca en las cuentas de la familia real española. Son algunos números de la Corona británica, la monarquía que siempre se cita como prototipo de transparencia. Datos divulgados bien por la prensa o bien procedentes de su último informe financiero anual, un documento de 136 páginas preñado de cifras y disponible en la web. Un texto que detalla cómo se gastó la reina Isabel II, entre marzo de 2010 y el mismo mes de 2011, los 32,1 millones de libras (38,55 millones de euros) que salieron de las arcas públicas. El mayor bocado, la lista civil (civil list, 13,7 millones de libras), sirve para cubrir sus obligaciones como jefa del Estado.
En España, parte del velo de opacidad que siempre se ha cernido sobre la monarquía caerá a finales de esta semana, previsiblemente a partir del martes, tras la solemne apertura de la X Legislatura en el Congreso. Como ya anunció la Zarzuela el 12 de diciembre, en plena tormenta por el caso Urdangarin, se detallará la asignación anual que reservan los Presupuestos Generales del Estado (PGE). Cantidad que en 2011 ascendió a 8.434.280 euros, un 5,2% menos que en 2010.
Pero los 8,43 millones son sólo una parte mínima del coste real de la Corona. Hay que sumar las partidas que el Gobierno reserva para Juan Carlos y su familia –viajes oficiales, recepciones, salarios del personal de la Zarzuela…– y para la conservación de los palacios y jardines, y que figuran en otras partidas de los Presupuestos. Escondidas, pero ahí están. Ello haría un total de 59,28 millones. Aún habría que añadir los gastos de seguridad, de coches y chóferes, o de la Guardia Real. Estos costes los asumen los ministerios del Interior, de Defensa y de Hacienda, pero el importe se mantiene en secreto.
01. LA ASIGNACIÓN ANUAL
¿Cuánto cobra el monarca?
El rey, como dispone el artículo 65.1 de la Constitución, distribuye «libremente» la cantidad que recibe del Estado «para el sostenimiento de su familia y Casa». ¿Y qué se paga con esos 8,43 millones? Gastos de funcionamiento (como material de oficina), de protocolo y representación, vestido y peluquería, dietas o salarios de la alta dirección –»Unas 17 personas», según la Zarzuela–.
1979 fue el último año en que se divulgó el salario del rey: 4,5 millones de pesetas y otros 5,5 en gastos de representación
En ella se adscriben los sueldos del jefe de la Casa, Rafael Spottorno, que cobra «como un ministro» (68.981 euros, tras el recorte de 2010) y los de sus subordinados: el secretario general, Alfonso Sanz; el interventor, Óscar Moreno Gil; los secretarios de la reina –general José Cabrera– y de los príncipes –Jaime Alfonsín–; el jefe del Cuarto Militar, general Antonio de la Corte, y el de Protocolo, Cándido Creis; los directores generales de Administración y de Relaciones con los Medios, Isaías Peral y Ramón Iribarren, y el gabinete de Planificación y Coordinación y el Servicio de Seguridad.
De los 8,43 millones sale también el sueldo de los reyes y de Felipe y Letizia, los únicos que viven exclusivamente del Presupuesto. Y de ahí parten asimismo las asignaciones que, en función de su agenda oficial, cada vez más menguante, reciben la infanta Elena y los duques de Palma. El mismo 12 de diciembre, Spottorno ya anunció que Iñaki Urdangarin era apartado de las actividades institucionales por su actitud «no ejemplar» al frente de Instituto Nóos, epicentro de una presunta trama urdida por el yerno del rey y su socio, Diego Torres, para «apoderarse» de fondos públicos. El jefe de la Casa no despejó si Cristina sería excluida de los actos de la Corona.
¿Y cuánto cobra el rey? Esta semana se conocerá por fin, tras una larga batalla de IU, ICV, ERC y BNG. Concluirán así 32 años de secretismo. Justo desde 1979, la última vez en que unos Presupuestos desnudaron el salario del monarca. En aquel año, en la ley 1/1979, de 19 de julio, se detalló que Juan Carlos percibiría 4,5 millones de pesetas de dotación (145.911 euros de los de hoy), más otros 5,5 millones de gastos de representación. Total, 10 millones de pesetas –igual que en 1978 y 1977–, que equivaldrían a 324.246 euros, ya que el coste de la vida ha crecido desde entonces casi cinco veces. La actualización a euros, sin embargo, no tiene en cuenta las subidas o bajadas de sueldo que haya podido sufrir su remuneración.
La revista Tiempo adelantó la semana pasada los pormenores de esa asignación de 1979. La Casa Real recibió un total de 155,7 millones de pesetas, por lo que los 10 millones destinados al rey suponían un 6,4%. No obstante, en aquellos 155,7 millones se incluían recepciones, actos y viajes oficiales, que hoy están recogidos en otras partidas distintas a la de los 8,43 millones de euros.
El pasado viernes, un portavoz de la Zarzuela aclaraba que el nivel de detalle que se alcanzará ahora será «en principio semejante» al de 1979. O sea, que se describirán los salarios de la familia real y de la alta dirección, los gastos de representación, las dietas, los complementos a los trabajadores de la Casa o el global de los gastos corrientes. No está «previsto» que trascienda la declaración de la renta –los reyes y sus hijos y consortes están sujetos al pago de impuestos– o una relación de su patrimonio. Aquí seguirá el oscurantismo. «Está en su mano hacerlo o no hacerlo, es su intimidad», justificaba un portavoz oficial. En 2002, la revista británica Eurobusiness atribuyó a Juan Carlos una fortuna de 1.790 millones de euros, cifra que entonces y ahora la Zarzuela tacha de «disparatada», pues suma el valor de los palacios y jardines reales (Oriente, El Escorial, Aranjuez, La Granja, El Pardo, el monasterio de Las Descalzas… o la propia Zarzuela), que son propiedad del Estado y que custodia Patrimonio Nacional.
De nuevo, nada que ver con Reino Unido. Isabel II dispone de un patrimonio personal (privy purse), englobado bajo la cartera del ducado de Lancaster. Su capital, formado por 18.700 hectáreas en Inglaterra y Gales y por inversiones financieras, tenía un valor el pasado marzo de 383,19 millones de libras (460,18 millones de euros), un 10% más que en 2010. La reina no puede vender los bienes del ducado (pertenece al Estado), que pasan automáticamente a su sucesor en el trono. Pero sí beneficiarse de sus rentas. Con ellas afronta gastos privados y los sueldos de su familia, salvo el de su marido, el duque de Edinburgo, que recibe un salario público, y el de su hijo Carlos, el príncipe de Gales, que vive de lo que ingresa del ducado de Cornualles. La soberana sí es dueña del castillo de Balmoral –comprado por la reina Victoria en 1848– y de la casa de campo de Sandringham.
02. LOS VIAJES OFICIALES
A cargo de Exteriores
Una factura que el rey no paga: los viajes oficiales al extranjero, que corren a cargo del Ministerio de Exteriores. Para 2011, la Corona programó 15 desplazamientos, con un coste de 415.050 euros. En 2009, la Jefatura del Estado previó 15, pero al final se realizaron 21, con lo que el gasto subió de 345.000 a 698.510 euros.
En 2011 se previeron 15 desplazamientos al extranjero, por 415.050 euros
No se desmenuza de qué viajes se trata. Lo contrario que la Casa Real británica, que precisa desde la visita de la reina y su esposo a Abu Dhabi (356.253 libras) hasta la estancia de tres días en Canadá del duque de Kent, primo de Isabel II (11.668 libras) o el coste del tren de Bath a Londres para Carlos y su mujer, Camila Parker, duquesa de Cornualles (18.960 libras). En total, de los 32,1 millones de libras de dinero público, Buckingham separó para viajes seis millones (7,2 millones de euros). La Zarzuela se limita a explicar que los viajes oficiales son abonados por Exteriores, mientras que los trayectos privados –como el vuelo de Sofía a Washington hace casi un mes, cuando se dejó fotografiar con los duques de Palma– salen de los 8,43 millones.
03. PERSONAL Y PALACIOS
Lo paga el Ministerio de la Presidencia
En la Casa del Rey están destinados 135 trabajadores (ocho eventuales y 127 funcionarios), y los retribuye el Ministerio de la Presidencia a través del programa 911Q de los Presupuestos –Apoyo a la gestión administrativa de la Jefatura del Estado–. Para ello reservó 5,89 millones de euros en 2011, más otros 304.400 para gastos corrientes. El monto global, 6,2 millones. La Zarzuela tiene potestad para elegir a sus trabajadores, a los que paga un complemento que descuenta de su fondo anual.
En recepciones, 10 millones; en los sueldos de los funcionarios de la Casa, 6,2 millones
Bajo el epígrafe Servicios a la Corona y actos de Estado, Presidencia consigna los 10,01 millones de gasto de las 98 recepciones oficiales, audiencias civiles y militares, cenas de gala, visitas de jefes de Estado… Ese coste era mayor en 2010 –se previó cerrar el año con 11,3 millones– y, sobre todo, en 2009 (16,3 millones).
Hasta aquí, la factura descrita alcanza los 25.067.890 euros.
Hay más: Presidencia corre con la cuenta de Patrimonio Nacional. En 2011 apartó 19,77 millones para la conservación de palacios y otros 14,44 para el cuidado de jardines (34,2 millones en total). Patrimonio asume igualmente las partidas menos pomposas, como la polémica compra de una cinta de correr de lujo para el rey (14.065 euros en 2008).
En Reino Unido, el presupuesto para los palacios ocupados es de 11,9 millones de libras (14,2 millones de euros), pero esa partida está integrada en la cuenta de los 32,1 millones. En 2004, la reina pidió una subvención diseñada para gente sin recursos para poder asumir los elevados gastos de calefacción de los palacios. El Gobierno laborista se lo negó.
04. LA INCÓGNITA
Seguridad, coches, militares
Gobierno y Zarzuela evitan desbrozar el coste en seguridad o en vehículos oficiales
Si se rastrean los PGE, no hay forma de encontrar cuánto cuesta la seguridad de la Corona (que abonan Interior y Defensa), o el Cuarto Militar y los 1.500 efectivos de la Guardia Real (que dependen de Defensa), o de cuántos chóferes y vehículos dispone la Casa (afrontado por Hacienda a través del Parque Móvil del Estado). Público preguntó a los tres ministerios. Ninguno dio datos. O por razones de «seguridad» o porque los debe suministrar «la propia Casa».
La Zarzuela, a la inversa, esgrime que la información ha de trasladarla el Gobierno, aunque también se aferra a motivos de «seguridad». Se ignora incluso el número de escoltas que cortejan a Juan Carlos I y su familia. Esos datos, pues, en principio no trascenderán esta semana. El coste real de la Corona seguirá siendo un misterio. Menos que antes, pero misterio.