Pasalavoz

 

En Durban, a cinco días de iniciada la XVII Cumbre de la ONU sobre Cambio Climático (COP17), se respira incertidumbre sobre los resultados finales de las negociaciones sobre cambio climático y del futuro del Protocolo de Kioto.

En este marco, el Foro Internacional de Pueblos Indígenas sobre Cambio Climático (FIPICC) y las distintas delegaciones se han pronunciado por un segundo período del Protocolo de Kioto 2013 – 2020, y que éste sea vinculante de manera obligatoria para todos los países del mundo.

Por su parte, el coordinador general de la Coordinadora Andina De Organizaciones Indígenas (CAOI), Miguel Palacín Quispe, exigió respeto a la madre tierra y a los pueblos indígenas, y la gestión de ecosistemas estratégicos basados en el Buen Vivir.

En el curso de la semana, movimientos indígenas y sociales se reunieron con representantes de los países integrantes de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de nuestra América (ALBA). Coincidieron en sus críticas al manejo del Fondo Verde y al Banco Mundial, que debería estar fuera del manejo de todo fondo vinculado al cambio climático.

Diversas organizaciones de la sociedad civil, igualmente, señalaron que los países llamados desarrollados deberían adoptar un segundo compromiso para reducir emisiones conforme al Protocolo de Kyoto.

El movimiento sindical internacional insta a los gobiernos reunidos en la conferencia de Durban a abandonar su posición cómoda y tomar decisiones para negociar un instrumento mundial jurídicamente vinculante para todos los países y financiar el Fondo Climático Verde de 100 mil millones de dólares.

En tanto que Oilwatch propone colocar al petróleo, al gas y al carbón, en el centro de las discusiones nacionales e internacionales.

El domingo 4 de diciembre tendrá lugar una jornada de movilización en Durban, promovida por una amplia gama de organizaciones sociales, ante la negativa de Estados Unidos, Australia, Nueva Zelanda, Rusia y Japón a la adopción de compromisos vinculantes para la reducción de gases contaminantes.