El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, anunció una “batalla frontal” contra la corrupción e instó a las autoridades estadounidenses y brasileñas a entregar todas las listas de posibles corruptos en el país relacionadas con el caso Odebrecht.
Moreno dijo en el discurso de investidura que alentará a la creación de un “frente nacional, publico y privado, para combatir la corrupción”, y que éste deberá tener una proyección internacional.
La propuesta de Moreno prevé armar una comisión con integrantes de la sociedad civil y los organismos de control para constituir una entidad con asistencia internacional de Naciones Unidas para estructurar y aplicar una política de lucha contra la corrupción.