Pablo Kummetz


La mayor contaminación la provocan los cruceros y yates, dice el diario alemán «Süddeutsche Zeitung» haciendo referencia a las bolsas de plástico, los juguetes viejos, las latas y otros metales que pueden encontrarse en varios lugares del fondo del Mediterráneo.

En el artículo, titulado «Desechado por la borda», el rotativo de Múnich denuncia que al faenar en las costas de Mallorca, por ejemplo, los pescadores encuentran cada vez más «botellas de plástico, bolsas, latas y bidones de gasolina» entre los peces y el marisco de sus redes. Muchas veces los restos se hallan también en el aparato digestivo de los animales.

Lenta degradación

Lo peor de todo es que debido a la falta de luz y oxígeno, es muy difícil que el cristal, el metal y el plástico que se acumulan durante décadas en el fondo marino se degraden, explicó al diario el científico Francois Galgani, del Instituto francés de Investigación Marina Ifremer.

Playa de El Masnou, cerca de Barcelona.Bildunterschrift: Großansicht des Bildes mit der Bildunterschrift: Playa de El Masnou, cerca de Barcelona.«El agua alrededor de Mallorca está muy limpia. Desde hace tiempo las fábricas y los hoteles no arrojan nada más al mar. Sin embargo, no existe ningún fondo marino más sucio que el del Mediterráneo», insiste el periódico alemán.

Neveras y latas de pintura

«Se pueden encontrar incluso neveras y botes de puntura», asegura Rafael Mas, un pescador de Mallorca que cada día, siguiendo una larga tradición familiar, echa sus redes al mar.

«No te puedes imaginar lo que es cuando llevas todo el día faenando y al final tienes que tirar todo porque los peces están llenos de pintura».

«Y todo sólo porque un buen señor sólo necesitaba la mitad del bote de pintura y no sabía que hacer con el resto», criticó el mismo coincidiendo con Pep Amengual, del Ministerio de medio Ambiente de Baleares.

En su opinión, sin embargo, el mayor peligro para el mar que rodea a Mallorca lo suponen los pescadores, más que la basura, cuyos efectos, según dijo a «Süddeutsche zeitung», son todavía difíciles de calcular.