Agencias

Washington. – La presidenta saliente de la Cámara de Representantes de EEUU, Nancy Pelosi, prometió  que liderizará una tenaz oposición a los republicanos, que este miércoles toman el control de ese órgano legistlativo, aunque se comprometió a trabajar en algunos aspectos con ellos.

Pelosi, que completó este martes su último día como la primera presidenta de la Cámara de Representantes en la historia de Estados Unidos, puesto que asumió en enero de 2007 tras la victoria demócrata en noviembre de 2006, precisó que esa oposición se hará firme si entiende que los republicanos socavan la economía.

Desde este miércoles, la también legisladora demócrata por California cede el cargo al legislador republicano de Ohio, John Boehner y, en ese cambio de guardia en la sesión 112 del Congreso, asumirá el papel de líder de la minoría.

Durante una conferencia de prensa, flanqueada por banderas estadounidenses y otros líderes demócratas, Pelosi dijo no tener nada que lamentar durante su gestión en la Cámara Baja, pero mantendrá en la mira a los republicanos.

“Trabajaremos con ellos cuando se trate de lograr los objetivos para la creación de empleos y la reducción del déficit. Sin embargo, encontrarán en nosotros una leal pero centrada y tenaz oposición cuando se hagan cosas que consideremos que socavan nuestra economía y agravan el déficit”, advirtió Pelosi. “Trabajaremos todos los días para exigirle cuentas a los republicanos por las promesas que han hecho”, sentenció.

Pelosi lanzó una férrea defensa de los beneficios de la reforma de salud, aprobada el año pasado y que los republicanos preven revocar mediante un voto la próxima semana. El plan republicano de anular esa reforma, a juicio de Pelosi, representa un acto de “violencia muy grave a la deuda nacional y el déficit”.

La reforma era un mal necesario porque sin ella “no podríamos sostener el sistema”, explicó Pelosi en un hacinado salón en el Capitolio. “El costo del cuidado de salud para las familias, los pequeños negocios y corporaciones de EE.UU., nuestra economía y para el presupuesto federal era insostenible. Esa es una de las razones por las que fue necesaria la reforma de salud”, enfatizó.

Pelosi fue secundada por la legisladora demócrata Rosa DeLauro, quien aseguró que la revocación de la reforma sanitaria es un “teatro político” de los republicanos y que simplemente “no va a suceder”. Tras los comicios de noviembre pasado, los republicanos ahora tienen una ventaja de 241-194 sobre los demócratas en la Cámara baja.

Pero la agenda republicana afrontará un camino escabroso en el Senado, donde los demócratas aún mantienen una ventaja numérica, aunque reducida. Los demócratas controlan el Senado, 51-47, con la ayuda de dos independientes que suelen votar con ellos, y sólo necesitarán 41 votos para frenar iniciativas que apruebe la Cámara de Representantes.

Durante su mandato de casi cuatro años, Pelosi se destacó por mantener la disciplina de su partido en el debate y votación de un amplio gama de proyectos de envergadura nacional e internacional. Con Pelosi al mando, la Cámara de Representantes aprobó leyes para el aumento del salario mínimo, un plan de estímulo económico, equidad salarial para las mujeres y las históricas reformas de los sistemas de salud y financiero.

Pero, horas antes de que Pelosi hiciera el traspaso de mando, grupos conservadores recurrían a la blogósfera para responsabilizarle, entre otras cosas, del problema de la deuda nacional, que ha pasado la marca de los 14 billones de dólares, según el Departamento del Tesoro. El presidente Barack Obama promulgó en febrero del año pasado una ley que establece un límite a la deuda nacional de 14,29 billones de dólares.

Los republicanos, envalentonados por sus conquistas en los comicios legislativos de noviembre pasado, han prometido, de entrada, promover medidas para reducir de inmediato el déficit fiscal. Su primera gran batalla será, sin duda, la revocación de la reforma de salud que, aunque prospere en la Cámara de Representantes, se topará con un muro de resistencia de los demócratas en el Senado.