Por Sebastián Premici /El Destape

BlackRock siempre está. El fondo de inversión de Larry Fink, que funciona como una gran mamushka para ocultar a los verdaderos dueños del poder económico global, es el segundo acreedor privado de la Argentina, detrás del FMI, a partir de sus inversiones en diferentes empresas del país (YPF, Pan American Energy, Bunge, Mercado Libre, entre otras) y la tenencia de los bonos reestructurados por Martín Guzmán en 2020. En total, tendrían una posición equivalente a 6000 millones dólares.

El pulpo financiero llevó adelante un exhaustivo seguimiento de la administración Milei desde los primeros días de su llegada a la Casa Rosada. “Argentina es nuestro segundo portfolio más grande de inversiones en la región”, admitió BlackRock en un informe publicado el pasado 17 de mayo con la firma de Christopher Brinkman, quien estuvo en el país en enero de este año, reunido con la ahora ex canciller Diana Mondino.

Según la información oficial, en aquel encuentro confluyeron otros representantes del mundo financiero global: Abuwala Anish (Portfolio Manager en Balyasny Asset Management); Heringer Rodson (Socio de Carrhae Capital); y Eduardo Jorge Tapia (Latin Securities S.A).

Por entonces, la empresa de Fink estaba interesada en conocer el andamiaje jurídico que se había diseñado desde La Libertad Avanza en colaboración con los mayores estudios de abogados del país: el DNU 70/23 y la Ley de Bases. Brinkman se interiorizó especialmente por el Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones (RIGI).

Al pasar los meses, Brinkman continuó con su “auditoria” de la casta mileista. “El país necesita pasar por un doloroso proceso de ajuste. Tenemos la esperanza de que el país saldrá fortalecido de este proceso de ajuste, pero por ahora tenemos una exposición limitada a la economía argentina”, escribió en otro documento difundido el pasado 27 de septiembre.

Con la victoria de Donald Trump, sumado al auge de Elon Musk, Milei ansía concretar el demorado encuentro con Fink. La entrega de los principales recursos naturales del país, en la mira del gigante financiero.

El nexo

El principal nexo de Milei con BlackRock se da a través de Dario Epstein, asesor económico del Presidente y candidato para ocupar la presidencia de la DAIA. En junio, el economista organizó el evento Latam Economic Forum; lo hizo desde sus empresas Research for Traders y SCITUS FINANCES S.A. También formó parte del Foro una fundación vinculada a la Jabad Lubavich (La Fundación Jabad), otro de los sostenes ideológicos de Milei.

BlackRock maneja en el mundo 6 mil billones de dólares, los PBI de Alemania y Francia unidos. En Argentina, posee activos por 6000 millones de dólares distribuidos entre empresas claves del sector energético y alimenticio, sumado a bonos del Tesoro.

Estas inversiones están distribuidas en Coca-Cola, Bayer, Apple, Microsoft, Telefónica o Procter & Gamble; también participa de Mercado Libre, Tenaris, Grupo Galicia, Banco Macro, Telecom, Pampa Energía, TGN, Arcos Dorados y Adecoagro.

Hasta el mes pasado, BlackRock mantenía una relación de prudencia con el país; le exigía a Milei la profundización del ajuste como paso previo para incrementar sus posiciones. El Gobierno nacional cumplió. “Ese intervalo de duro esfuerzo y dolor terminó”, sostuvo el Presidente durante un acto organizado por la Cámara Argentina de Comercio.

Con la llegada de Trump al poder de los Estados Unidos, sumado a las maniobras financieras de Luis Caputo que permitieron bajar el riesgo país (la única variante que ven los dueños el poder económico global), la relación con Argentina entraría en otro ritmo. Así lo transmitió Pablo Goldberg, un egresado de la Universidad Di Tella, ex HSBC, con el cargo de head of Research and Portfolio Manager for BlackRock’s Emerging Market Debt Team.

El litio

BlackRock integra la principal empresa de litio del país, Rio Tinto, conglomerado que surgió de la fusión entre Livent y Allkem. Los tentáculos de este pulpo financiero poseen el siguiente alcance:

*La empresa Livent tenía dos proyectos, uno en Antofagasta de la Sierra y otro en Guemes, Salta. El fondo de Larry Fink cuenta con el 15,76% de las acciones de esta minera, seguido por Vanguard Group (11%), Wellington Managment (7%) entre otros. La empresa nació dentro de la estructura de Lithium Corporation America en 1940, como parte de un proyecto conjunto con el gobierno norteamericano.

* Según las memorias y balances de BlackRock, una de las empresas asesoras por el Fondo que lidera Fink es Lithium Americas Argentina Corp, propiedad de Lithium Americas Corp. Además, participa de su estructura accionaria vía Standard & Poor’s.

*El proyecto Cauchari, en Jujuy, ubicado en el departamento de Susque, pertenecía a Orocobre Limited, vendido a la empresa Allkem, fusionada con Livent hace dos años, ahora bajo propiedad de Río Tinto. Por ende, BlackRock lidera esta inversión en la provincia norteña.

Subordinación

Demócratas o Republicanos. Lo invariable. el Departamento de Estado norteamericano tiene un pie sobre los principales recursos de litio y minerales críticos del país, a través de un nuevo mecanismo de intervención e injerencia sobre los países de Latinoamérica: la Alianza para la Seguridad de los Minerales Críticos. Así quedó establecido en un “Memorándum de Cooperación para la Gobernanza, la Inversión y la Seguridad de las cadenas de suministro a nivel mundial”, firmado por el Estado argentino y su par norteamericano el pasado 22 de agosto.

“El Gobierno nacional de la República Argentina tiene la intención de proveer información a los Estados Unidos respecto de potenciales licitaciones y proyectos en el país tan pronto como dicha información se encuentre disponible. El Gobierno Nacional hará todo lo que se encuentre a su alcance para alentar a los gobiernos subnacionales (las provincias) a proporcionar esta información lo antes posible para garantizar que las empresas con sede en los Estados Unidos y los socios de la Asociación para la Seguridad de los Minerales tengan suficiente tiempo para participar”, puede leerse en el documento al que accedió El Destape luego de formular dos pedidos de acceso a la información pública.

A la par de estos acuerdos, la generala del Comando Sur Laura Richardson, manifestó: “Tenemos el pie en el acelerador. Y tenemos que acelerar los procesos para que la seguridad económica sea la seguridad nacional en el hemisferio”.

La narrativa oficial camufla este avance sobre la soberanía de los países de la región como “proyectos de inversión de litio”, que traducido al idioma del MSP implica profundizar el enfrentamiento norteamericano con China, Rusia y otros países. Detrás de estas iniciativas se encuentran los grandes conglomerados norteamericanos. Ya nadie disimula nada.

“No recuerdo otros momentos donde hayamos estado tan concentrados en Argentina como en los últimos dos meses. La cooperación vinculada a los minerales críticos es clave. De hecho, (Antony), Blinken -secretario de Estado norteamericano- estuvo abocado a la supervisión de este tema durante las últimas dos semanas”, había manifestado el embajador Marc Stanley durante un evento organizado por la AmCham, la cámara que nuclea los intereses de las empresas norteamericanas en el país, en marzo de este año.

BlackRock, Elon Musk y el Departamento de Estado nortemaericano se anotan a la cabeza para avanzar sobre la captación de los llamados minerales críticos, bajo la estructura jurídica ideada por La Libertad Avanza.