Agencias

La oposición prodemocracia obtuvo una victoria abrumadora en las elecciones generales celebradas este domingo en Tailandia, aunque ninguno de los dos principales partidos opositores logró la mayoría absoluta, de acuerdo con las cifras divulgadas con más del 97 por ciento de los votos escrutados.

El joven partido Move Forward, de carácter progresista y con una ambiciosa agenda reformista, se perfila como el ganador con más de 13,5 millones de votos y unos 150 escaños, mientras que el Pheu Thai, ligado al poderoso clan Shinawatra y también reformista, quedaría segundo con más de 10,3 millones de papeletas y 144 diputados, según las proyecciones de los medios.

El líder de Move Forward, el empresario Pita Limjaroenrat, de 42 años, dijo que había llegado «el tiempo del cambio para Tailandia”. Los sondeos previos daban por ganadores a los partidos pro democráticos. United Thai Nation, encabezado por el primer ministro y general golpista Prayut Chan-ocha, está en quinta posición con 4,5 millones de apoyos y 38 diputados.

¿Coalición para el cambio?

Pese a sus malos resultados, el primer ministro podría seguir en el poder. Tras el golpe de 2014, los militares cambiaron la constitución tailandesa para favorecerse. Aparte de los 500 diputados que se eligen por votación popular, los militares escogen a 250 senadores. Todos los parlamentarios juntos deciden quién encabezará el nuevo gobierno, y es poco probable que los leales a las fuerzas armadas respalden a alguien de la oposición.

Sin embargo, si Move Forward y Pheu Thai forman una coalición y consiguen el apoyo de partidos más pequeños, podrían convertirse en quienes encabecen la transición y saquen del poder al Prayut Chan-ocha.

Estas elecciones son las primeras que se celebran desde que en 2020 estallaran en Bangkok importantes protestas prodemocráticas encabezadas por jóvenes, con demandas para frenar el poder y el gasto del rey de Tailandia, rompiendo así un tabú largamente arraigado sobre el cuestionamiento de la monarquía.