Actualidad.RT
Aunque las tasas de desempleo caigan en EE.UU., la economía del país ya está en recesión, asegura Albert Edwards, reputado analista bursátil y estratega del banco francés Societe Generale.
«El importante indicador oficial de EE.UU. nos dice que la recesión es un hecho, no mañana, ni la semana que viene, sino hoy», declaró refiriéndose al índice económico líder para EE.UU. de la organización Conference Board, que se encuentra ahora en niveles coherentes con el inicio de los periodos de recesiones pasadas.
Subrayó que, aunque los últimos datos de la Oficina de Estadísticas Laborales indican que la tasa de desempleo en el país ha caído al 3,4 % y se han creado 253.000 nuevos puestos de trabajo –superando así las expectativas de 180.000–, hay que esperar a la revisión de los datos. «¿Cómo puede estar la economía en recesión cuando las nóminas y el producto interno bruto siguen creciendo y mientras muchos otros datos no son sólidos? La respuesta obvia es, como a principios de 2008 [cuando estalló la crisis financiera mundial], las revisiones», señaló el experto.
De hecho, las revisiones de los datos de febrero y marzo muestran un debilitamiento del mercado laboral: el número de empleos creados en febrero se revisó a la baja, de 326.000 a 248.000, y el de marzo, de 236.000 a 165.000.
Además, Edwards afirma que los beneficios corporativos, que siguen siendo elevados a pesar del aumento de los costes, tendrán un «camino muy, muy largo para caer» en el futuro. Sostiene que las empresas que mantienen unos costes elevados para aumentar sus beneficios se están perjudicando a sí mismas, ya que esto alimenta aún más la inflación. «Los inversores aplauden la ‘avaricia’ de las microempresas, ya que los beneficios van bien, pero las consecuencias más generales para la inflación y los tipos de interés apuntan a una profunda recesión», dijo.
Como consecuencia, es probable que el mercado bursátil caiga, ya que el comportamiento de las acciones está estrechamente vinculado a los beneficios y ganancias de las empresas.
Cabe señalar que la Reserva Federal de EE.UU. (Fed) ya subió este miércoles los tipos de interés en un 0,25 % hasta alcanzar el nivel más alto en 16 años. Las subidas de tipos, que comenzaron en marzo de 2022, ya aumentaron el riesgo de recesión, duplicaron los tipos hipotecarios, elevaron los costes de los préstamos para automóviles y tarjetas de crédito, así como también a empresas.
Además, la subida de los tipos ha contribuido a la quiebra de tres grandes bancos estadounidenses y a la inestabilidad del sector bancario, ya que las entidades bancarias que experimentaron la quiebra habían comprado bonos a largo plazo que pagaban tipos bajos y que perdieron su valor rápidamente cuando la Fed elevó las tasas.