TeleSUR


El mandatario conversó con la prensa antes de abordar el avión que lo llevará a Turquía. (Foto: Efe)


El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, confirmó este miércoles en China que no  tiene intenciones de aspirar por un tercer mandato e informó que la candidata oficialista a sucederle, Dilma Rousseff, se encuentra en buen estado de salud después de que fuera hospitalizada este martes por una miopatía.

«Yo no discuto hipótesis», respondió Lula a los periodistas, antes de abandonar la capital china, al ser preguntado sobre qué sucedería si Rousseff no se confirma como candidata.

«Primero porque no va a haber un tercer mandato, y segundo porque Dilma está bien», prosiguió.

Lula explicó que había hablado con ella a las 21h00 de Brasil (00h00 GMT) y que había tenido «una reacción a la quimioterapia», explicó.

El presidente brasileño, de 63 años, añadió que, según los doctores, «no hay que preocuparse».

Rousseff, actual ministra de la Presidencia, que padece cáncer, fue hospitalizada en la madrugada de este martes ayer debido a una miopatía (inflamación muscular), pero se encuentra estable y bajo efecto de los analgésicos, según el boletín divulgado por el Hospital Sirio Libanés de Sao Paulo.

La ministra, designada por Lula como su posible candidata, está siendo sometida a quimioterapia para ser tratada de un linfoma (cáncer en el sistema linfático).

Lo que pasó en China

El presidente partió este miércoles de Pekín rumbo a Turquía, tras una visita de tres días a China en la cual las dos potencias firmaron numerosos acuerdos, incluyendo un préstamo chino para la estatal petrolera Petrobras.

En el área tecnológica, se informó que los dos países deseaban lanzar hasta tres satélites de aquí a 2013. Los cohetes chinos ya pusieron en órbita tres satélites desarrollados por Brasil entre 1999 y 2007.

Lula describió la etapa china de su gira como «una de las más importantes» de su gestión presidencial, iniciada en 2003, en momentos en que la crisis económica puso en evidencia la importancia creciente de los grandes países emergentes.

Lula y su homólogo chino Hu Jintao, que se reunieron este martes, convinieron en reforzar la cooperación económica y comercial bilateral.

Pekín y Brasilia firmaron trece acuerdos, entre ellos un préstamo de 10 mil millones de dólares del China Development Bank a Petrobras, que se compromete por su lado a suministro crudo al país asiático durante diez años (150 mil barriles diarios el primer año y 200 mil barriles los otros nueve).