Enrique Muñoz Gamarra

Amables lectores, escribí este libro, «DESCLASIFICACIÓN DE ARCHIVOS SECRETOS DE LA CAÍDA DE OCCIDENTE», teniendo en cuenta que en las actuales circunstancias mundiales, es muy importante seguir acentuando en la debacle de la economía estadounidense y en general en la caída de occidente.

De momento entrego a la opinión pública mundial, estos tres materiales (Dedicatoria, Breves notas del autor e Introducción).

Es mi deseo hacer público este libro en su versión impreso. Llamo a las editoriales a fin de que puedan publicar este inédito material (pueden comunicarse a la siguiente dirección de correo electrónico: enrique.mg1954@hotmail.com ).

Aquí algunas características del libro:

I.- Título: Desclasificación de Archivos Secretos de la Caída de Occidente.

II.-Número de páginas: 603.

II.- Capítulos: 7.

1.- Siglo XX: El gran proceso y la conferencia de Bretton Woods.

2.- Década del setenta (siglo XX) e inicios del nuevo milenio (antes del 2008): agotamiento del sistema capitalista.

3.- 2008-2013: La gran crisis economica, bancarrota de la economía estadounidense y perdida de su hegemonía mundial.

4.- 2014-2016: China primera potencia capitalista.

5.- 2017-2019: Implosión de la arquitectura deL dominio imperialista occidental.

6.- 2020-2021: Languidecimiento de la economía capitalista y entrampamiento geopolítico mundial.

7.- 2022 para adelante: confrontación inter-imperialista, paridad estratégica y alzamiento de las luchas revolucionarias en el mundo».

IV.- Notas a pie de página: 986.

Atentamente:

Enrique Muñoz Gamarra.

Sociólogo peruano

Firenze-Italia

DEDICATORIA: Este libro va dedicado a los eminentes analistas e investigadores que escriben en las prensas digitales, cuyos trabajos son archivados y censurados por la prepotente historia oficial de occidente. Son admirables sus capacidades de análisis por el que son perseguidos, encarcelados e incluso asesinados (incinerados). Este libro está escrito sobre la base de sus grandiosos aportes.

BREVES NOTAS DEL AUTOR:

Ante todo, debo advertir que mis modestos análisis acerca de la nueva situación mundial (después del 2008) siempre han corrido sosteniéndose en pruebas y sus respectivas fuentes. Una extraordinaria regla de abordaje de la investigación científica.

Así, en este libro, DESCLASIFICACIÓN DE ARCHIVOS SECRETOS DE LA CAÍDA DE OCCIDENTE, utilizo la cronología sustentándome, de principio a fin, en los datos. Es una cronología de datos que, en su mayoría, por no decir la totalidad, provienen de las prensas digitales, prensas totalmente censuradas y archivadas por la historia oficial prepotente de occidente, ejemplo, Rusia Today y sputnik (prensas rusas), en el actual conflicto en Ucrania. Por eso tiene este título. Algo inédito. Alguien dijo que era una mina de datos. En efecto, se trata de un libro de puro datos. El libro está escrito, del primer capítulo al séptimo (602 paginas), solo a base de datos con sus respectivas fuentes. En realidad, una cronología centrada en los hechos ocurridos en los últimos tramos de la historia mundial (después del 2008) en la que precisamente cae occidente.

Por supuesto, el libro no está exento de limitaciones. Nada es perfecto ni nada está terminado en el mundo. Aquel siempre está en movimiento y en proceso constante de cambio, por eso, el conocimiento es relativo. Entonces, los hechos señalados en el presente libro no son totales, lo que quiere decir, que hay mucho por añadir y mucho por investigar.

Consiguientemente, este libro, más que un libro ideologizado, es un libro investigativo. Un libro de recopilación de información, producto de mis inquietudes de análisis e investigación iniciados en el año 2007-2008.

Escribo este libro en una época especial para la humanidad. En una época llena de zozobras y penurias económicas para los pueblos. Cuando la economía capitalista mundial ha ingresado a una fase de languidecimiento. Cuando el trabajo ha sido afectado desde sus raíces. Cuando el embrutecimiento ideológico desde las transnacionales informativas es aún más agresivo que en la época de Goebels y Hitler. Cuando USSAID ha logrado introducir cientos y miles de incautos en las «células durmientes». Cuando el proceso de idiotización de la humanidad es brutal. Cuando en algunos ya no hay ni filosofía ni historia en sus cerebros. Cuando el Estado y las fuerzas armadas se han declarado abiertamente a favor de los que controlan los medios de producción. Incluso, cuando la vieja burguesía estadounidense se ha atrevido al ataque químico-bacteriológico (Covid-19) contra la humanidad. Al fin y al cabo, cuando los pueblos empiezan a alzarse.

El capitalismo es una sociedad clasista, de opresores y oprimidos, basada en la propiedad privada sobre los medios de producción más importantes de la nación por una cuatrinca de ladrones y estafadores que controlan al milímetro sus Estados, sus ejércitos y sus leyes. Esto ahora está declarado abiertamente. La burguesía estadounidense arremete con furia por conservar sus privilegios de hegemon mundial perdido en 2010 e imponiéndose el fascismo ha empezado a desembarcar en varias regiones del planeta, causando en ellas cruentas destrucciones y crueles genocidios.

En el curso de estos hechos unos perdieron la fe en el futuro. Olvidando la tendencia mundial han pasado a esperanzarse en China como el norte natural de la nueva Era, del nuevo orden mundial. Cierto no puede negarse el gran avance económico de China. Es en efecto la primera potencia economica capitalista. Pero esto no da derecho a pasar por alto la persistente vigencia de la gran fase depresiva que asola el mundo.

Por supuesto, en otros hay ímpetus revolucionarios. Para ellos la nueva era mundial que se va abriendo no es la del social-imperialismo chino, en todo caso si se impone, solo será la del evolucionismo chino que no durará más de lo que ha durado la unipolaridad de la vieja burguesía financiera estadounidense (ni siquiera dos décadas). La nueva Era que se va abriendo es aquella que va forjando el proletariado con su alzamiento hacia el socialismo y el comunismo. No entender esto, significa cerrar los ojos a la luminosa tendencia señalada por la historia.

Es en este curso que avanza y se agita este libro. Os invito a darle una hojeada.

ENRIQUE MUÑOZ GAMARRA

Firenze (Italia)

Junio de 2022

INTRODUCCIÓN:

Es necesario siempre acentuar la contradicción y el movimiento. La contradicción y el movimiento son lo universal de lo que existe.

Nada es estático. Todo es movimiento. Pero, el movimiento es solo a consecuencia de la contradicción. Lo central de todo es la contradicción. Dialécticamente la contradicción y el movimiento están condenados a marchar siempre juntos.

Entonces, la contradicción y el movimiento, son lo absoluto, son una ley universal. La humanidad está sujeta a esta ley. Nadie se escapa a ella. Basta con decir que la ascensión del hombre como especie humana, es consecuencia de esta ley universal. Somos consecuencia de la contradicción y el movimiento.

En el devenir del hombre la historia se convierte en lo más importante. En lo más trascendental. El hombre sin la historia no es nada. La historia registra las contradicciones en pleno movimiento. En ella queda grabado la vida y el conocimiento del hombre. Sella su destino, su tendencia histórica, siempre incurso en la contradicción y el movimiento. Sobre esta base se edifica el materialismo dialectico e histórico. Y, a partir de ahí, deviene en un legado científico, en lo mejor de los conocimientos habidos hasta la actualidad. Un conocimiento que se engarza plenamente con la ideología de la clase más revolucionaria, el proletariado, encargado de edificar la nueva sociedad, la sociedad comunista. En ella se estrellan todas las mediocridades ideológicas de las clases reaccionarias que se oponen al cambio y el avance mundial.

Además, no es posible olvidar la importancia de cada periodo de la historia. Esto se refiere a la importancia de la continuidad histórica, Todos los que han dejado de observar la continuidad histórica han terminado siempre deformando la historia y cayendo en flagrantes errores. He ahí el origen de las desviaciones anti-históricas, caldo de cultivo de las desviaciones anti-marxistas. Pues, sin ella, el riesgo era la perdida de las perspectivas históricas y la caída en la confusión y la desorientación.

Consiguientemente, para empezar a leer el presente trabajo, es necesario previamente tomar nota de algunos datos provenientes del materialismo dialectico e histórico:

Primero, algunos estudios científicos sostienen que aproximadamente hace quince mil millones de años se habría producido una gran explosión (Big Bang) y que aparentemente aquello indicaría el origen del universo, pero teniendo en cuenta la lógica de estos análisis, es posible concluir en la existencia de otras explosiones similares en el pasado, lo que nos llevarían incluso al colapso de las matemáticas y, en lo fundamental, a mantener en vigencia la ley de la relatividad del conocimiento. Es más, la ciencia ha determinado que el universo está en un proceso constante de movimiento y sostiene que en estos momentos estaría avanzando hacia una nueva explosión (Implosión) empujada por grandiosas fuerzas concéntricas. Además, debemos tener en cuenta que la velocidad de la luz es de 299,792 kilómetros por segundo, la distancia de la tierra al sol es de 8 minutos/luz, desde Plutón hasta el sol hay 5 horas/luz, existen más de 100,000 galaxias (por lo menos esa es la cifra que hasta ahora se maneja y probablemente éstas se incrementen más adelante a medida que las ciencias tengan mayores avances), el sistema solar pertenece a la galaxia «Vía láctea» y la galaxia más cercana a la tierra está a 180,000 años/luz. Estos datos siguen señalando que la materia es absolutamente infinita, que no se crea ni se destruye, y es muy objetiva, muy a pesar de las objeciones de algunos científicos que llegaron afirmar que el universo era finito, pero, siempre sosteniéndose en el término «sin fronteras» por ser realmente ilimitado e infinito. En esto hay que tener mucho cuidado con los «nuevos datos» o «Avances científicos», en realidad groseras manipulaciones difundidas últimamente por la NASA y algunas otras de sus abyectas secciones. Sus objetivos son muy claros: empañar la teoría científica materialista acerca del origen del universo. Aparte de advertir estas malévolas intensiones de las secciones fascistas del imperialismo estadounidense, en lo central adjunto datos más o menos para tener una idea aproximada de lo que es el universo.

Sobre, el proceso de cambios en el planeta, el origen de la vida, las especies y el hombre, veamos las siguientes notas:

Segundo, las Eras geológicas son cinco: Uno: Pre-Cámbrico, es la primera, tiene dos fases, Arcaico que muestra a la tierra cubierto sobre todo de metano, amoniaco y vapor de agua, que por condensación de ésta última se habrían formado las grandes concentraciones de agua que dieron lugar a los océanos donde precisamente luego surgiría la vida. La otra fase es la denominada fase Proterozoica, periodo en la cual en concreto habría surgido la vida. Dos: Paleozoico ó Era Primaria, surgen las especies por la multiplicación de la vida, también tiene dos fases, Inferior (formación de la Capa de Ozono) y superior (se formó la Pangea, todos los continentes estuvieron unidos). Tres: Mesozoico ó Era Secundaria, se formaron los continentes, tiene tres fases, Triásico (dominio de los reptiles), Jurásico y Cretácico (emerge la Cordillera de los Andes, aparecen las aves, también los primeros mamíferos, extinción de los reptiles). Cuatro: Cenozoico ó Era Terciaria, se formaron las cordilleras, tiene cuatro fases, Eoceno, Oligoceno (se forma la Cordillera de los Alpes en Europa, América del sur se une a América del Norte), Mioceno (los monos poblaron la tierra, se desarrollaron especies avanzados entre ellas el Antropomorfo, especie de mono sin cola) y, Plioceno (se formó el Mar Rojo y el Himalaya en el Asia). Cinco: Antropozoico o Era Cuaternaria, tiene dos fases, Pleistoceno (fase de las glaciaciones, aparece el hombre) y Holoceno (periodo post-glacial.).

Tercero, el origen de la vida data aproximadamente de hace tres mil millones de años. Son tres mil millones de años, no es poca cosa. Se habría producido en el periodo pre-cámbrico (primera Era geológica), en su fase Proterozoico, después de innumerables cambios drásticos en el clima y los componentes atmosféricos, lo que habría originado el agua, dando lugar posteriormente a grandes concentraciones de este elemento, donde justamente se habría producido la vida.

Cuarto, el origen de las especies se produce en el periodo paleozoico (segunda Era geológica) o Era Primaria, debido a la multiplicación de la vida que había aparecido en esas grandes concentraciones de agua, denominada mares y océanos.

Quinto, el origen del hombre se ubica aproximadamente hace catorce millones de años, fecha en que se habría iniciado con mayor probabilidad el llamado periodo de la Hominización. En realidad, esto corresponde a una etapa muy larga, evolutiva y compleja que va desde las escalas inferiores donde su carácter bípedo fue imponiéndose paulatinamente trasuntando este periodo en medio del farragoso afán del trabajo y dando lugar al Homínido (especie de mono y hombre.) se prolongó hasta la especie Cromagnon y de allí se encumbraría hasta el hombre actual. No existe otra forma de abordar el origen del hombre. Lo de Dios y de tanto otro idilio, sobre todo, de tendencia clerical simplemente no tiene sentido ni siquiera ganas de discutirlo.

Sexto, la Revolución Neolítica o Revolución Agrícola, se habría producido aproximadamente hace 6000 años a.C. Consiste en el descubrimiento de la agricultura, la misma que ocasionó la aparición del excedente de producción y la sedentarización del hombre que luego originó la propiedad privada, el Estado, las clases sociales, la desintegración de la comunidad primitiva y el surgimiento de la sociedad clasista. Ciertamente, a partir de aquí la vida del hombre ha discurrido en medio de duras confrontaciones o en medio de la lucha clases.

Séptimo, el origen de la escritura data aproximadamente de hace 5000 años a. C.

Octavo, la revolución socialista ocurrida en octubre de 1917 en Rusia. En 2017 aquella gesta cumplió los cien años. Este hecho es muy importante en la vida de los hombres, pues, indica, el momento exacto en que se produce, por primera vez, el establecimiento de un Estado socialista en el mundo. Fue un movimiento revolucionario absolutamente acorde a la marcha que sigue la historia, cuya concreción constituyó la victoria de las concepciones materialistas acerca del mundo. Su esencia fue la supresión de la propiedad privada sobre los medios de producción y el establecimiento de la propiedad colectiva (ocurrió, por lo menos, al inicio de aquella gesta). Un gran esfuerzo del hombre progresista por dirigirse en la dirección que indicaban las leyes económicas mundiales: la sociedad comunista.

Entonces de acuerdo a lo anterior ha quedado muy claro que el desplazamiento del hombre a través de la historia ha sido en medio de duras confrontaciones. Ciertamente, Marx y Engels han tenido toda la razón del mundo cuando sostuvieron que la partera de la historia era la violencia. Esto demuestra la total vigencia de sus análisis y la vigencia del marxismo como lo mejor y científico de los conocimientos del hombre.

Saltándonos algunas fases de la historia humana y ubicándonos en estas últimas décadas de la historia del sistema capitalista (2008 para adelante), es, esta misma ciencia, la historia, que una vez más, se ha encargado en recordarnos que lo central de todo cambio y transformación en el mundo es el movimiento constante como producto de la contradicción que hay en la naturaleza y la sociedad. Cierto, en estas últimas décadas el sistema imperialista ha estado siendo arrastrado por una violenta vorágine de crisis agobiado por las enormes sobrecapacidades productivas y la gran sobre-acumulación de capitales ficticios, que corroe sus cimientos económicos desde el año 2008 en el marco de la gran fase depresiva iniciada en 1973.

Por supuesto esto ha tenido enormes consecuencias, por un lado, la ruina y la bancarrota de las economías, estadounidense y europea, con su correlato más inmediato, la pérdida de la hegemonía mundial estadounidense en 2010. Y, por el otro, la ascensión capitalista de China, la reconversión de Rusia como una gran potencia militar y también la ascensión a una gran potencia nuclear de la República Popular Democrática de Corea (un país socialista, una esperanza para los pueblos oprimidos, algo excepcional y única en la historia reciente de la humanidad).

Todo esto ha ido desarrollándose en el curso del duro proceso de reajuste del sistema capitalista mundial, que dio paso a la reconfiguración del poder mundial. En efecto este es un proceso que, en el curso de la gran crisis economica y la paridad estratégica, dio origen a una nueva estructura economica capitalista encabezada por China.

Y, de acuerdo a los mecanismos de inter-relación de base y superestructura, la nueva estructura económica del capitalismo mundial (base) está dejando impregnado su sello en el nuevo sistema internacional (superestructura), concretándose como sistema multipolar. En realidad, un proceso científico que los «doctorcitos» del Pentágono jamás lo entenderían. Esto sobrevino de forma crucial y demoledora contra el sistema unipolar establecido en 1991. Ocurrió en 2010 tras la constatación de la equiparación de fuerzas (nucleares) en las tres superpotencias más armadas del planeta (Rusia, Estados Unidos y China).

Cierto, mientras Estados Unidos estaba jugando a las «revoluciones de colores» y a los cowboys en Afganistán e Irak, China y Rusia habían ido completando su ascenso económico-militar. Tras aquellos hechos, la equiparación de fuerzas con Rusia y China, sonaba para Estados Unidos, algo así, como insolencias difíciles de digerir.

Entonces el negro periodo de la globalización anticomunista (1980-2010) como expresión del sistema unipolar y bajo la férula de Estados Unidos, estaba siendo demolido. Ahora vivimos tiempos históricos. Tiempos inexorables. El desplazamiento del bloque imperialista occidental encabezado por Estados Unidos, es realmente excepcional. Algo que ha roto el espinazo del dominio hegemónico estadounidense que por más de un siglo ha ocasionado enormes sufrimientos a los pueblos del mundo entero.

A inicios del 2013 el panorama económico mundial se mostraba de esta forma:

Una mirada a China. Su ascenso había sido vertiginoso. No olvidemos que en 2009 China ya era el primer exportador del mundo. En 2010 se convierte en la segunda economía mundial. Ese mismo año (2010) el acuerdo estratégico económico, Usa-China, establecido en 1979, fue suprimido. Luego Europa se convierte en el mayor socio comercial de China. Y, finalmente, desde el año 2012, es el primer socio comercial del mundo.

También una mirada a Estados Unidos. La crisis ha sido demoledora en este país. La bancarrota económica aquí sigue siendo muy grave. En primer lugar, la incidencia de la manufactura en su economía se ha encogido, ha pasado de 28% en 1953 a 11% en 2010. Por lo demás, la economía estadounidense avanza, cada vez más, a una economía de servicios y, su deuda, por supuesto, no es solo de 16 billones de dólares, como acostumbran hablar las prensas occidentales, sino, de 180 billones (privada, medicare y seguridad social) y, lo peor de todo, esto está cada vez más en crecimiento, algo realmente espantoso.

Luego, China ha devenido en la primera potencia capitalista mundial, ha desplazado de ese puesto a Estados Unidos que lo ostentaba por más de un siglo. Recordemos que en 2013, China se convirtió en el primer país comercial y en 2014 el mayor país capitalista del mundo. Segundo, India también ha desplazado a Japón del tercero al cuarto lugar.

Entonces de acuerdo a estos fenomenales cambios la relación de países en orden de importancia en la nueva estructura económica del sistema capitalista mundial, es la siguiente: Primero, China. Segundo Estados Unidos. Tercero, India. Cuarto, Japón. Quinto, Alemania. Sexto, Rusia. Sin olvidar que, en una estimación, de acuerdo al crecimiento de los PBI actuales, existe la posibilidad de que la India también en unos años más este dejando atrás a Estados Unidos. Y, por el otro, Japón, Alemania y Gran Bretaña empieza a cuestionar la política exterior estadounidense, tratando de romper los grilletes impuestos por aquel en 1945. Todo esto ocurre en lo más profundo de la economía mundial, no en los cascarones de los gobiernos de estos países (Olaf Scholz, Emmanuel Macron, etc.), en realidad, una vieja superestructura que ya no cuadra con la nueva estructura económica del capitalismo mundial surgido después de 2008.

Sin embargo, los hechos no han quedado aquí, han seguido su curso al influjo de esta misma tendencia. En efecto en el año 2015 sobrevino el periodo que más se temía en geo economía mundial, el periodo que aceleraría el hundimiento económico de Estados Unidos a efecto de su confrontación con China, que desde 2010 estuvo latente cuando ocurrió la ruptura del acuerdo estratégico que existía entre ambos países en materia económica, llámese si se quiere, «Guerra Fría». En esto es muy importante el dato que se tiene aún desde el año 2011. Esto ahora es una realidad difícil de soslayarla: «La política actual de Washington es mantener su supremacía militar en Asia, pero una carrera armamentística con China podría hacer que la Guerra Fría (la que hubo con la ex URSS) nos pareciera una minucia. La economía de la Unión Soviética representaba solo una cuarta parte de la de Estados Unidos cuando se produjo aquella carrera armamentística. Si Estados Unidos entrara en un proceso serio de ese tipo con China, los estadounidenses podrían olvidarse de Medicare, la seguridad social y de la mayor de aquello en lo que el gobierno de Estados Unidos gasta su dinero» (1).

Finalmente, como un resultado de lo anterior, tenemos ante nosotros, la implosión de la arquitectura del dominio imperialista occidental ocurrido a finales del año 2016. Esto de antemano ya estaba sellado desde el año 2010 cuando se produjo la pérdida de la hegemonía mundial estadounidense. Y, a partir de aquí, empieza un proceso de entrelazamiento de una nueva arquitectura de dominio del sistema capitalista mundial emergida tras la gran crisis económica del 2008 bajo egida de la nueva estructura economica capitalista con China como primera potencia capitalista mundial y el sistema multipolar en el sistema internacional. Esto está en proceso. Queréis pruebas sobre esto, observad lo que hay en la olla de grillos de la Unión Europea (unos países quieren ejércitos propios, otros están contra las sanciones a Rusia, etc.). También lo que en Oriente Medio (un solo misil de Hamas o Hezbolla puede hacer saltar en mil pedazos a los sionistas). En el Sur de Asia. En el Sudeste Asiático. En la península coreana (RPDC).

No hay que olvidar que en este momento China empieza a imponerse a Estados Unidos en las tecnologías, entre ellas, la denominada tecnología 5G y la tecnología cuántica, que en los hechos significa imposición en los medios de comunicación, sobre todo, con enorme trascendencia en el espionaje y el control mundial. Esto, ciertamente, revienta el alma a la vieja burguesía estadounidense.

Así, el siniestro grupo de poder de Washington, en realidad, la gran burguesía financiera del orbe, no es capaz ni siquiera de resolver el asunto sirio-iraní. Y, el tiempo, el tiempo es su peor enemigo, pues, a medida que transcurre aquel, su situación se va complicando aún más. Consiguientemente está enloquecida, Entonces, sintiéndose, a sí mismo, el país más armado y militarizado del planeta, se orienta hacia las provocaciones de conflictos y por supuesto hacia las agresiones más descaradas contra los países desarmados.

En lo que respecta a las perspectivas del sistema capitalista, hasta aquí la burguesía estadounidense está siendo arrastrada a graves provocaciones, pero, siempre declarando solemnemente que no desea la confrontación frontal con las otras superpotencias. Es el peso de la paridad estratégica lo que lo hace decir esto. Últimamente, en el curso del operativo militar de Rusia sobre Ucrania, hubo acuerdos oficiales en este sentido, entre China, Estados Unidos y Rusia. Y al parecer esto es lo que va imponerse, es decir, recambios mundiales capitalistas sin ingresar al conflicto directo entre las tres superpotencias, es decir, aceptación de cambios o imposiciones de recambio mundial sobre la base de las colusiones, como ocurrió en 1991 en Rusia, que de hecho está en proceso desde 2010 cuando se impuso la multipolaridad, pues si Estados Unidos se hubiese sentido lo suficientemente, fuerte hubiera reaccionado en aquel momento con una confrontación frontal, no lo hizo porque sencillamente ya estaba disminuido, incluso militarmente, sencillamente había aceptado la paridad estratégica.

Sin embargo, este proceso lento o evolutivo de traspaso del poder mundial, es muy riesgosa, sobre todo, cuando Rusia y China tienen pronunciadas contemplaciones (colusiones) con las provocaciones de aquel país (Estados Unidos) que incluso ha ocasionado que las fuerzas militares estadounidense lleguen hasta las puertas de sus propias fronteras. Esto es aún más peligroso para los países que no tienen armamento nuclear, sobre todo, los países oprimidos. Ejemplo, lo que sucede en Siria, en el que está alargándose el genocidio por las componendas y colusiones entre Estados Unidos y Rusia que no permite a Siria una armamentística adecuada para resolver la agresión. Esto lo hemos denunciado en su oportunidad, incluso escribí un artículo publicado el 14 de septiembre de 2016 (2).

Tras la pérdida de la hegemonía mundial estadounidense en 2010 y la implosión de la arquitectura del dominio imperialista occidental a finales del año 2016, los poderes mundiales han ingresado a una coyuntura crucial. Esto es algo así como un hervidero de poderes, en el que cada grupo avanza según sus posibilidades, aunque por el momento los ejes de mando aún descansen en la órbita de los tres poderes más importantes: China, Estados Unidos y Rusia. Sin olvidar que entre los grupos de poder de segundo orden (India, Japón y Alemania) abrió la posibilidad de un futuro más prometedor.

Y en el actual contexto de hechos que corre entre finales de 2016 y comienzos de 2022, los posicionamientos geoestratégicos (juegos geoestratégicos inter-imperialistas), después de lo que significa la presión de la gran crisis económica del 2008 que es lo más importante en el futuro del sistema internacional, han pasado a ser en muy importantes.

Y en esas condiciones, aunque los polos están bien definidos, la ambición hegemónica de Estados Unidos y los cambios mundiales que siguen batiéndose fuertemente, obligaran a Rusia y China a marchar juntas, es decir, fortaleciendo su alianza estratégica en lo militar y alineando en esta perspectiva sus posicionamientos geoestratégicos.

En este marco, el actual impulso de la historia capitalista al influjo de la potencialidad de la paridad estratégica, ha conducido a la apertura de una nueva etapa en su desarrollo, al que hemos denominado la etapa de la paridad estratégica. Es una etapa que se impone por las actuales características mundiales del sistema capitalista, cuyas superpotencias actuales (China, Estados Unidos y Rusia) que controlan los destinos del mundo, son incapaces de cerrar la fase depresiva del sistema capitalista instalada en 1973, al estilo capitalista, es decir, con Tercera Guerra Mundial. En concreto aquella está referida al armamento nuclear que no les permite avanzar a la guerra frontal entre ellas, bajo riesgo de perder sus privilegios. Consecuentemente, esto insta a estas burguesías a que los recambios mundiales capitalistas deben avanzar sin ingresar al conflicto frontal, es decir, aceptando las imposiciones de la paridad estratégica que en esta etapa implica un avance sobre la base de las colusiones (esto indica que las colusiones entre estas superpotencias van a volverse en muy importantes en esta nueva etapa). Esto lo afirmo incluso a pesar del actual (2022) operativo militar especial de Rusia sobre Ucrania.

No podemos negar que las incapacidades geopolíticas de la burguesía estadounidense, han sido muy claras, que, en el fondo fueron sendas derrotas militares y claros signos de temor a las potencialidades militares de sus más mortales enemigos (Rusia y China). En este sentido, las incapacidades de la burguesía estadounidense después del 2008 han sido resonantes: así, por ejemplo, su incapacidad por ingresar a Irán, su incapacidad por derrocar el gobierno de Bashar Al Asad en Siria, su incapacidad por aniquilar el gobierno del Comandante Hugo Chávez y ahora de Nicolás Maduro y consecuentemente su incapacidad por ingresar a Venezuela. Incluso el ataque bacteriológico es parte de esta incapacidad por confrontarse directamente con Rusia y China. Son incapacidades que en realidad constituyen sendas derrotas militares del letal ejército estadounidense. Incapacidades que geopolíticamente muestran su temor a una confrontación frontal con las potencialidades militares (armamento nuclear) de sus más mortales enemigos, que al final podían dejarlos sin su privilegio de superpotencia. Al fin y al cabo, incapacidades que se asoman por su declive estratégico como máxima potencia mundial. Por supuesto, aquello no le ha quitado su derecho a fanfarronear, de encubrirse de una inmunda agresividad tal como fueron sus provocaciones, que en los últimos años estuvieron representadas por la «ferocidades» de Donald Trump y Joe Biden.

Pero los hechos avanzan. No se detienen. Las tormentas en la base economica han sido muy graves. Lo corroe la gran crisis economica. Las leyes económicas capitalistas han llegado a una situación de agolpamiento final. Es una crisis histórica. Si el proletariado se apura, puede ser una crisis terminal.

Cierto, del incesante avance de los hechos incursos en un persistente ahondamiento de la gran crisis economica capitalista y la imposición de la paridad estratégica deviene el grave IMPASSE Y ENTRAMPAMIENTO geopolítico mundial actual.

Pero en la imposición del impasse y entrampamiento geopolítico hay dos factores muy importantes:

Primero, las duras condiciones de la economía mundial, las catástrofes económicas en las superpotencias capitalistas, especialmente en Estados Unidos, es decir, aquello que hemos denominado como languidecimiento de la economía capitalista mundial.

Segundo, la paridad estratégica, que acogota a las burguesías, que no deja cerrar la gran fase depresiva.

De acuerdo a los hechos que se baten en el escenario mundial actual, es posible concluir que en lo inmediato esta nueva etapa de la paridad estratégica ingrese a un proceso de EVOLUCIONISMO POLÍTICO a fin de fortalecer las estructuras económicas, políticas y militares que estaban erigiéndose desde finales del año 2010 (perdida de la hegemonía mundial estadounidense). En este marco, por ejemplo, se puede observar lo ocurrido el 4 de febrero de 2022 cuando se produce la consolidación de la alianza estratégica, se dice multilateral, entre Rusia y China y el inicio del operativo militar especial de Rusia sobre Ucrania. Se trata de un proceso de establecimiento de estructuras económicas y políticas para esta etapa histórica de la paridad estratégica. En realidad, una etapa crucial para las burguesías financieras, especialmente, para la burguesía estadounidense que debe digerir la presencia de Rusia y China en la nueva estructura del poder mundial. Ciertamente, los hechos geopolíticos han estado corriendo e imponiéndose de acuerdo a la ley de la paridad estratégica.

La reciente escalada militar en Ucrania desatada por la burguesía estadounidense contra Rusia a fin de mantener su protagonismo mundial, ocurre en un momento totalmente inoportuno, cuando en el escenario internacional empiezan a relucir gérmenes de nuevas estructuras políticas (nueva superestructura política mundial) como consecuencia de las tempestades que habían venido batiéndose en la base economica desde el año 2008. Esto empieza a aclararse tras el inicio de la operación militar de Rusia sobre Ucrania y las dos contundentes respuestas militares anti-estadounidenses ocurridos en un mismo día (12 de marzo de 2022). El primero se trata de un ataque de alta precisión con misiles iskander efectuado por el ejército ruso contra un puesto de mando de las Fuerzas Armadas de Ucrania (en realidad un campo de entrenamiento de paramilitares fascistas de la OTAN en Yavorovsky) cerca de la frontera con Polonia donde habrían pulverizado a más de 180 paramilitares nazis. Y el segundo se trata del ataque que hizo el ejército iraní con lanzamiento de 12 misiles balísticos tipo Fateh-110 contra un centro estratégico perteneciente al Mossad israelí (una base militar de la inteligencia israelita en Erbil, en el Kurdistán iraquí), donde habrían muerto, nada menos, 9 generales sionistas junto a un número indeterminado de militares estadounidenses, que unos días antes habían asesinado a dos coroneles de la República islámica iraní. Son operaciones militares que demuestran la existencia de la ofensiva militar de estos países (Rusia, Irán, China), hasta entonces monopolio exclusivo del ejército estadounidense a lo largo de estos últimos años. Como sabemos Rusia ha estado hasta el 24 de febrero de 2022 en una permanente política militar defensiva. A partir de aquí, Rusia ha despertado. Lamentable para occidente.

Por lo tanto, la fuerza de la crisis económica (2008 y 2022) sigue siendo enorme, que zarandea a las burguesías de ambos bloques imperialistas (Rusia-China versus Estados Unidos y su aliada Europa) como si fueran simples marionetas. Es totalmente desestabilizante. Ocurre cuando el sistema capitalista está envuelto en un prolongado ciclo depresivo con unas burguesías altamente parasitarias, en abierta contradicción inter-imperialista, pero, en impasse y entrampamiento geopolítico y en el curso de la segunda y última fase del sistema capitalista. Una situación realmente histórica.

Y lo más importante, fuera de todo esto, una enorme ola de furia anti-estadounidense y anti-imperialista empieza alzarse en el mundo. Es el fantasma del comunismo, el fantasma que más temían las caducas burguesías financieras. No olvidemos que la mitad de la población mundial, es decir, 3.500 millones de personas viven con solo 2,5 dólares al día, sin olvidar que más de 1.300 millones de personas sufren extrema pobreza (viven con 1,25 dólares al día), además, hay 805 millones de personas que pasan hambre. ¿Es que hasta ahora estas burguesas siguen pensando que las luchas de esas enormes masas no tienen alguna incidencia en el futuro del mundo? Sencillamente en sus disipadas vidas han olvidado que la economía mundial no gira en torno a los robots, sino, a razón de la existencia de los hombres de carne y hueso que se alimentan, se educan, etc., en otras palabras, que consumen eso que se llama la producción social. Consecuentemente ni la economía mundial está en el aire ni las burguesías son dioses que están en los cielos. El proletariado empieza a rastrillar su ideología militante de esta época, que es el maoísmo. Las burguesías están asustadas.

«Hay un gran desorden bajo el cielo». La magistral visión del «Gran Timonel», el Presidente Mao Tse-Tung, resume la nueva situación mundial. Es que la catástrofe del más grande poderío económico militar construido sobre la faz de la tierra, es colosal. El letal imperialismo estadounidense está en picado. Pero la vieja burguesía financiera estadounidense se resiste, arma graves provocaciones, ahonda la guerra comercial y en su insana brutalidad quiere seguir arrasando países desarmados. Entonces el ruido es ensordecedor. Así las burguesías financieras han llegado a una de sus horas más cruciales de su existencia. Las noticias están corriendo más rápidas que nunca. Los cambios mundiales son inflexibles que no esperan a nadie.

Y no debemos olvidar que el cataclismo de cambios iniciado en 2008 es persistente. Para unos son cambios estructurales. Para otros, cambios tectónicos. Para los que entienden mínimamente la tendencia mundial, el proletariado ha empezado a abrir una nueva Era de lucha de clases. Esto es, desbrozar el camino de la revolución comunista. Consecuentemente, la nueva era mundial que se va abriendo no es la del social-imperialismo chino como algunos sostienen, en todo caso si se impone de acuerdo al duro proceso de reajuste capitalista en el que esta agolpado el sistema, este solo será la del evolucionismo chino que no existirá más de lo que existió la unipolaridad de la vieja burguesía estadounidense (ni siquiera dos décadas). La nueva Era que se avecina es la de las revoluciones comunistas vía al socialismo y el comunismo. Esa, si va ser una verdadera Era.

Y, finalmente, es mi obligación señalar el contenido del presente trabajo. Ante todo, debo advertir que este trabajo está redactado teniendo en cuenta siempre el avance de la historia entre flujos y reflujos (ascensos y descensos), zigzagueante, pero, al fin y al cabo, siempre observándolos como ascensionales, nunca en línea recta. En este marco, está delimitado entre el 2008 y 2022 (actualidad), es decir, su campo de acción está centrado en el tramo más importante de la historia del sistema capitalista y aquella está referido a la caída de occidente por la debacle de la economía estadounidense.

El libro está presentado en siete secciones o partes (capítulos). Cada uno representa un periodo debidamente sintetizado de la etapa que corre, esto es, entre el 2008 y 2022: 1.- «Siglo XX: El gran proceso y la conferencia de Bretton Woods». Aquí el lector podrá observar algunos datos de hechos ocurridos antes de la apertura de la gran fase depresiva del sistema capitalista en 1973. 2.- «Década del setenta (siglo XX) e inicios del nuevo milenio (antes del 2008): agotamiento del sistema capitalista». Esta parte del trabajo es muy importante porque en este periodo empieza a aclararse el agotamiento del sistema de producción capitalista. Este es el momento del ingreso de este sistema a su fase depresiva más larga y tal vez definitiva. La historia lo decidirá. 3.- «2008-2013: La gran crisis economica, bancarrota de la economía estadounidense y perdida de su hegemonía mundial». Se ha producido lo más importante de la gran crisis economica del 2008. 4.- «2014-2016: China primera potencia capitalista». Aquí los datos son muy claros, los hechos demuestran los grandes cambios que estaban produciéndose en el mundo. Es muy clara la ascensión economica de China. 5.- «2017-2019: Implosión de la arquitectura imperialista occidental». La situación de occidente empieza a complicarse. Estados Unidos tras la pérdida de la hegemonía mundial, siente que la arquitectura del dominio imperialista occidental esta implosionando. Entonces, el sistema internacional basada en la multipolaridad, empieza a ganar terreno. 6.- «2020-2021: Languidecimiento de la economía capitalista y entrampamiento geopolítico mundial». Tras el ataque bacteriológico a finales de 2019, la crisis economica empieza ahondarse, incluso hay ruptura de las cadenas de suministro. Todo tiende hacia la hambruna global. 7.- «2022 para adelante: confrontación inter-imperialista, paridad estrategica y alzamiento de las luchas revolucionarias en el mundo».

NOTAS:

(1).- «¿Debería preocuparnos que China supere a Estados Unidos?» Noticia aparecida el 29 de abril de 2011, en: spanish.china.org.cn.

(2).- «Embrollos geopolíticos en Siria»: https://www.hispantv.com/noticias/opinion/287852/guerra-siria-eeuu-agresion-apoyo-grupos-armados-terroristas