El subsecretario de Estado norteamericano, Brian Nichols, confirmó este lunes que Estados Unidos excluirá a Cuba, Venezuela y Nicaragua de la Cumbre de las Américas, pese a los llamados en el continente a realizar un evento inclusivo.
El diplomático compartió en su cuenta de Twitter un fragmento de una entrevista al canal colombiano NTN24 en la cual afirma que esos países no serán convocados a la cita prevista para celebrarse en junio en Los Angeles porque en opinión de Washington “no respetan la carta democrática”.
Al preguntarle específicamente si Cuba sería invitada, el funcionario estadounidense encargado de los asuntos de América Latina y el Caribe, aseveró rotundamente que no, que era una decisión del presidente dejar fuera a esas naciones.
Cuba denunció la semana pasada en voz de su canciller Bruno Rodríguez la exclusión de La Habana de los preparativos del foro y la presión ejercida sobre gobiernos de la región que se oponen a esa postura.
El jefe de la diplomacia cubana aseguró que obviar la presencia de la nación caribeña en esa reunión sería un grave retroceso histórico que iría en detrimento de los objetivos de concertación.
Rodríguez aseveró que la intención de excluir a la nación caribeña obedecería a una maniobra políticamente motivada, como parte del doble rasero vinculado a la situación interna y electoral de Estados Unidos.
El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, subrayó que Estados Unidos no comprende que América Latina y el Caribe cambiaron para siempre y que no hay cabida para reinstaurar la Doctrina Monroe y la visión panamericanista, con las cuales pretende imponer su dominación hegemónica en el Hemisferio Occidental.
En igual sentido se manifestó el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, quien en su reciente diálogo con el gobernante estadounidense, Joe Biden, pidió invitar a “todos los pueblos de América”.
En entrevista al diario estadounidense The Hill, el vicecanciller de Cuba Carlos Fernández de Cossío reprobó que el gobierno estadounidense, como anfitrión del foro, se sienta con el privilegio de llamar solamente a quien quiere y aún así llamar al evento Cumbre de las Américas.
En realidad la Casa Blanca pretende hacer una reunión de amigos que sean capaces de escuchar lo que dice Estados Unidos, aceptar la agenda de Estados Unidos y replicar lo que dice Estados Unidos, agregó De Cossío.
Representantes de organizaciones sindicales y sociales del mundo expresaron este lunes en La Habana que de consumarse la idea de apartar a Cuba, Washington estaría abusando de sus facultades y arrogándose el derecho de excluir a su conveniencia a un país que es ejemplo de humanismo.
Celac y Grupo de Puebla demandan una Cumbre de las Américas sin exclusiones
El Grupo de Puebla y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) llamaron este lunes a celebrar una Cumbre de las Américas sin excluir a ninguna nación, en un mensaje claro a sus organizadores.
El Grupo de Puebla invita al Gobierno del Presidente (de Estados Unidos, Joe) Biden a realizar la próxima Cumbre de las Américas en los Ángeles, en el mes de junio, sin excluir a los gobiernos de Venezuela, Cuba y Nicaragua”, afirmó la agrupación política en un comunicado.
Según este foro de líderes políticos de izquierda, dejar por fuera a estos países que han sufrido “los costos sociales del impacto depredador del virus del COVID-19” no tienen ningún sentido, si a fin de cuentas se analizará como tema central de la Cumbre el manejo de la pandemia y el cambio climático en la región.
Todos los países latinoamericanos requieren de la cooperación internacional y el intercambio económico para poder soportar la factura social y atender la reactivación económica derivada de la pandemia. Algunos de ellos como Cuba podrían inclusive aportar mucho en nuevas experiencias para la prevención y erradicación del virus y sus posibles nuevas variaciones”, indicó.
De igual forma, resaltó que esta sería una discriminación por razones ideológica que afectaría las posibilidades de cooperación regional necesaria para superar las crisis venideras.
Por su parte, la Celac insistió en que “es indispensable que superemos las divisiones ideológicas y nos enfoquemos en la búsqueda de coincidencias”, debido a las graves consecuencias que la pandemia del coronavirus ha dejado en la región.
Este organismo multilateral reivindica el diálogo y la cooperación como herramientas claves para el bienestar de los pueblos. Por eso, considera que esta Cumbre de las Américas “representa una gran oportunidad para construir un espacio de encuentro en el que participen todos los países del hemisferio de modo abierto e inclusivo, bajo el objetivo unificador de concertar acciones conjuntas”.
La Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, especialmente Argentina, nación que ostenta la presidencia pro témpore de esta entidad intergubernamental, instó a los organizadores “a evitar exclusiones que impidan que todas las voces del hemisferio dialoguen y sean escuchadas”.
Díaz-Canel: la Cumbre de las Américas no debería ser de EEUU
Cuba dice que Washington no puede vetar su presencia en Cumbre de las Américas y rechaza celebración de una “cumbre de EE.UU. y sus estados selectivos”.
“Queremos una Cumbre de las Américas y no una cumbre de EE.UU. y sus estados selectivos”, afirmó el lunes el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, tras el anuncio de Washington de que ve “poco probable” que países como Cuba, Venezuela o Nicaragua pudieran ser convocados para la próxima Cumbre, que tendrá lugar el próximo mes de junio en California, Estados Unidos.
En declaraciones ofrecidas durante un foro de solidaridad con Cuba en La Habana (capital cubana), en el que participaron más de mil representantes de más de 50 naciones, Díaz-Canel tachó de “fallida” la política que dirige Estados Unidos hacia su país, denunciando que el país norteamericano tiene el objetivo de “ejercer la máxima presión, para generar desestabilización”.
Mientras tanto, aseguró que, con esta política, Estados Unidos “volverá a fracasar en su propósito de derrocar a la revolución”.