A principios de junio y a pesar de la reticencia de ciertos grupos, el Parlamento Europeo daba vía libre a la liberalización de patentes de la vacuna contra el Covid-19. Después de centrar el debate durante meses, la insistencia e ímpetu con el que se defendió la iniciativa han ido perdiendo fuelle hasta caer en el estancamiento. De hecho, a día de hoy esa vía se encuentra totalmente “paralizada”, aseguran a Redacción Médica fuentes de la Eurocámara, que indican que los esfuerzos de Bruselas están focalizados en el apoyo a la industrialización de los países menos desarrollados, así como al refuerzo de la distribución de dosis a través de mecanismos como Covax.
Los grupos de PSOE, Ciudadanos, PNV y PP en la Eurocámara realizan una interpretación similar de la deriva de esa iniciativa destinada, a priori, a facilitar la liberalización de patentes de forma temporal. La realidad, inciden, es que cuatro meses después de que se aprobara la modificación del acuerdo sobre aspectos de los derechos de propiedad intelectual relacionados con el comercio (Adpic), el debate se encuentra en dique seco.
En concreto, el Parlamento Europeo aprobó una enmienda que establecía una exención que permitía a los países que carecen de capacidad para fabricar medicamentos genéricos solicitar licencias obligatorias para importar dichos fármacos de países que pueden producirlos. El Consejo de la Unión Europea reconocía como “necesarias” este tipo de medidas urgentes para apoyar el I+D y aumentar la capacidad de producción de vacunas pero a su vez insistía en la necesidad de intensificar esfuerzos en el mecanismo Covax.
“Desde entonces habido mucho debate, pero no se ha avanzado más. El asunto está absolutamente paralizado desde la reunión que se produjo hace dos meses en el seno de la Organización Mundial del Comercio”, asume la eurodiputada naranja Soraya Rodríguez.
Dos posibles vías de actuación
La propia Rodríguez indica, en este sentido, que el organismo comunitario y la OMC tienen sobre la mesa dos vías de acción. La primera, relativa a esa liberalización temporal de las patentes, ha sido reavivada en los últimos meses por Sudáfrica e India. No obstante, el sentir mayoritario de la Eurocámara es el de avanzar en un acuerdo “multilateral” que permita establecer precios asequibles para los países más necesitados y facilitar el uso de licencias obligatorias.
Fruto de esta apuesta fue el acuerdo que recientemente sellaron la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen; y el presidente de EEUU, Joe Biden, que acordaron una “agenda común de vacunación” para superar el reto de inmunizar frente al Covid al 70 por ciento de la población mundial de cara a 2022 mediante el refuerzo del suministro y la distribución de dosis.
Desde el PNV recuerdan además que Europa sigue siendo el mayor donante de Covax, con 3.000 millones de euros en donaciones. En la última cumbre de principios de junio, este fondo cerró su déficit de financiación de 2021. Durante la cumbre, la UE apoyó directamente la donación a los socios africanos mediante un préstamo. En las últimas cifras, más de 93 millones de dosis han llegado a 134 países de todo el mundo. De ellas, 63 millones de dosis a 81 países de bajos ingresos.