Tras anunciarse que la vacuna de Pfizer/BioNTech contra el COVID-19 cuenta con ciertas especificaciones que la vuelven eficaz en los humanos, se reveló también que por la innovadora tecnología utilizada en su creación, uno de sus mayores retos es la distribución de la misma por todo el mundo, pues debe conservarse a temperaturas de hasta -70 grados centígrados.
Al respecto, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud en México, Hugo López-Gatell, aseguró que México no cuenta con una red de ultracongelación que lo ponga en camino a comprar las dosis necesarias de la vacuna, pero las posibilidades de inversión ya son evaluadas por las autoridades correspondientes. Además, aseguró que se trata de un obstáculo generalizado.
“No. México no tiene una red de ultra congelación como no lo tiene ningún país del mundo. Estados Unidos, donde tienen esta compañía Pfizer o Alemania, donde hay otra compañía asociada, tampoco la tienen”, aseguró en conferencia de prensa desde Palacio Nacional.
Explicó, además, los pormenores de la conservación de las vacunas:
En este contexto, informó que México enfrenta el reto de la distribución del producto, pues hablamos de millones de dosis en una realidad donde es indispensable que se realice una aplicación de la vacuna basada en la equidad. Para esto, sería necesario contar con la mencionada red de ultracongelación.
“Si habláramos de una sola dosis o un puñado de dosis, quizá esto no sería un reto. En cinco días habría suficiente tiempo para distribuirlas y usarlas. Cuando hablamos de millones de dosis y estamos pensando indispensable que haya equidad en la distribución, entonces tenemos que considerar el país en su conjunto, donde deberíamos tener la capacidad de llevar esta vacuna”.
Sin embargo, aseguró que Pfizer ya está en camino a fabricar algunos elementos o herramientas tecnológicas, por ejemplo, cajas de ultracongelación que permitieran, en algún momento dado, acercar la vacuna hasta los poblados más alejados de las urbes.
Por otra parte, indicó que las autoridades mexicanas ya consideran la inversión en una red de ultracongelación, los cuáles, informó, son de carácter industrial que, además, requieren de una gran demanda de energía eléctrica, así como la contratación de personal especializado en el manejo de éstos mismos.
“Aún así cuando hablamos de ultra congeladores, no hablamos de un refri del tamaño de lo que uno tiene en la casa, el cuál está entre dos y ocho grados centígrados, temperatura suficiente para considerar las demás vacunas, incluso el congelador doméstico está entre menos cuatro y menos 15 grados”, reveló Gatell.
Pero aclaró que no se trata de una inversión inmediata, pues primero analizarán los beneficios potenciales de tener esta vacuna, comparado con las otras posibles vacunas que ya están en su fase de experimentación, algunas de ellas en territorio mexicano.
“Dice la UNAM, que México debería invertir. Considero que sí, pero no necesariamente debe ser inmediata. Más bien, lo que hacemos es considerar los beneficios potenciales de tener esta vacuna en particular, comparado con otras posibles vacunas, respecto a la inversión en términos de tiempo y personal que se necesitaría para tener la capacidad de utilizar esta vacuna en un tiempo razonable”, informó.
Por el momento dijo, ya se firmó una carta de intención por parte del gobierno federal para tener la ventaja de acceder a ella oportunamente, pero hasta no llegar a una conclusión, no se formarán los contratos.
“Una de las consideraciones para firmarlos o no, depende de que sea realista la posibilidad de garantizar este sistema de ultra congelación que nos permita llevar en tiempo, forma y con las condiciones adecuadas este producto”, concluyó.