Y resaltó que “los ministerios a veces organizan misiones sin avisar a las embajadas”.
En ese marco, Timerman recordó que cuando eran ministros de Economía «ni (Domingo) Cavallo ni (Roberto) Lavagna invitaban a las embajadas cuando negociaban con los bancos».
«Las embajadas no son comisarías políticas», enfatizó el canciller.
La cartera a cargo del ministro Julio De Vido se refirió mediante un comunicado a la nota publicada por Clarín, que consignaba que un empleado de Economía realizó “sugestivos viajes” a Venezuela. «Los artículos publicados hoy en los diarios Clarín y La Nación, accionistas de Papel Prensa, constituyen una operación mediática conjunta contra un integrante de esta cartera, que tiene terminales en los mismos intereses que impulsaron a Sadous, y que no tienen otro objetivo que desprestigiar y cuestionar las relaciones económicas entre dos países soberanos», se afirmó.
Asimismo, la cartera de Planificación aclaró que «José María Olazagasti siempre viajó en representación de este ministerio, sin necesitar para ello mayor medalla que su voluntad de trabajar en pos de los intereses del país, ya que en este ministerio se mide a las personas por las tareas que realizan y no por ostentar determinados cargos, muchas veces cuestionados por ser onerosos para el Estado».
«De la misma manera, nunca realizó gestiones `paralelas` a las de la embajada o la Cancillería, cuyos miembros estuvieron al tanto e incluso participaron de las reuniones mencionadas en uno de los diarios», agregó.
Por su parte, el subsecretario de Integración Americana y Mercosur de la Cancillería, Eduardo Sigal, se refirió a la columna en el diario La Nación, que hablaba sobre una presunta “embajada paralela” en Venezuela, y aseguró que la publicación «y algunos diplomáticos amigos de Sadous tergiversan la realidad».
«No hubo ni hay diplomacia paralela, aquí hay un accionar del gobierno argentino para que los productos elaborados en nuestro país se vendan en el exterior porque exportar es sinónimo de trabajo, y si lo que exportamos es con valor agregado es trabajo de calidad», afirmó.
«Lo único que yo busqué con un cable reservado es que se incluya a dos empresas argentinas que lo solicitaban en el programa de reconversión eléctrica en Venezuela», remarcó Sigal.
Y señaló que «todo lo demás es invento. Cuando yo hago referencia a una reunión de la comisión binacional de alto nivel y a las reuniones que paralelamente a ella se realizan entre empresarios y funcionarios, no estoy diciendo que haya un accionar paralelo de esos funcionarios ni de nadie».
«Sólo es un método de trabajo que si un diplomático irresponsable no hubiera dejado trascender a la prensa no estaríamos que estar explicando», finalizó.