EFE / LibreRed.Net
El ministro de Defensa de Perú, Rafael Rey, (Foto) afirmó este miércoles que desconoce los pormenores de la situación de la periodista peruana Vicky Peláez, detenida en Estados Unidos junto a una decena de personas por supuestamente ser agentes de la inteligencia rusa.
“La única información que tengo es la que ha salido hoy en los medios. Ojalá que no sea verdad y se demuestre su inocencia”, declaró Rey a los periodistas.
El ministro enfatizó, sin embargo, que si las acusaciones se confirman la periodista deberá “pagar como corresponde” ya que todos los países “tienen derecho a proteger su información”.
Vicky Peláez, columnista del diario neoyorquino en español El Diario/La Prensa, fue arrestada el domingo pasado junto a su esposo, el uruguayo Juan Lázaro, en su residencia en la localidad de Yonkers, al norte de la ciudad de Nueva York.
Los servicios de seguridad estadounidenses los acusan de realizar durante un “largo periodo de tiempo” misiones encubiertas “de manera ilegal” como agentes para Rusia, por lo que se enfrentan a dos causas criminales presentadas por separado con cargos de “conspiración”.
Peláez, que lleva casi treinta años en EE.UU., escribe artículos de opinión en los que defiende a líderes latinoamericanos como el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, y critica duramente el neoliberalismo y las políticas del Gobierno estadounidense.
La madre de la periodista, Angélica Ocampo, declaró hoy en Lima que su hija es inocente de los cargos y manifestó su intención de viajar a Estados Unidos para conocer su verdadera situación.
“Voy a dar la vida, si quieren matarme que lo hagan, pero no le hagan daño a mi hija, menos por falsedades y mentiras. Me quedaré sin casa, hasta calata (desnuda), pero contrataré a un abogado que la defienda”, señaló al Canal N de la televisión local.
Ocampo aseguró que su hija nunca haría nada “inmoral” y destacó que es muy respetada por la comunidad latina y peruana en Estados Unidos.
“Si algo no le parecía, ella lo denunciaba. No se quedaba callada”, enfatizó.