Gonzalo Sanchez
Tercerainformacion
Coincidiendo con el Mundial de Fútbol que se está celebrando en Sudáfrica el presidente de España, José Luis Rodríguez Zapatero, está desempeñando un enorme trabajo tanto en su gobierno como en la presidencia española de la Unión Europea.
Este trabajo consiste en la imposición de un Plan de Ajuste aplaudido por la derecha y la patronal, mientras es criticado por los grupos de izquierda en el parlamento y por los sindicatos de trabajadores que ya han convocado una Huelga General para el próximo 29 de septiembre.
En Europa la labor de la presidencia española se ha materializado en la aprobación de un documento, llamado 8570/10, por el que se permite espiar con todos los medios del gobierno a cualquier persona sospechosa de haberse «radicalizado» hasta convertirse en terrorista. Esta iniciativa fue aprobada hace dos meses por el Consejo de la Unión Europea, presidido por el ministro español de asuntos exteriores, Miguel Ángel Moratinos, con el apoyo entre otros grupos del Partido Popular Europeo y del Partido Socialista Europeo.
El documento se refiere en varias ocasiones a la lucha que la Unión Europea lleva manteniendo contra el terrorismo desde el 2005, lucha que tiene entre sus principales ejes la «prevención». Evocando este valor la iniciativa 8570/10 establece el derecho de los estados miembros a espiar a cualquier ciudadano sospechoso de protagonizar un «proceso de radicalización» que lo «lleve al terrorismo».
El documento hace mención especial a las personas de extrema izquierda, anti-globalización, extrema derecha, nacionalistas y los fundamentalistas religiosos como candidatos para ser terroristas, y pueden ser vigilados usen o no la violencia en sus acciones.
El movimiento contra la globalización está integrado por movimientos políticos y sociales de izquierda, por lo que para la Unión Europea, extrema izquierda es todo aquello que rechace el capitalismo y apueste por una alternativa más social.
El texto aprobado en la institución europea presidida por Moratinos llama a compartir esta información con el resto de estados miembros de la Unión y con los cuerpos policiales europeos.
La Organización No Gubernamental (ONG) statewatch.org que vela por los derechos civiles en Europa ha declarado que este documento «no se dirige en primer lugar hacia personas o grupos que pretendan cometer atentados terroristas, sino a gente que tiene puntos de vista radicales, a los que se define como propagadores de mensajes radicales». En todos los paises europeos existen ya códigos penales que contienen artículos precisos sobre el terrorismo, lo que desenmascara esta iniciativa 8570/10 como una perseguidora de ideas, también según statewatch.org.