Pese a posteriores excusas de Otero -quien dijo a Clarín de Argentina que «la mayor parte de Chile no sintió la dictadura» (1973-90)- y explicaciones de Moreno en el sentido de que fueron «opiniones personales», diversas bancadas parlamentarias acordaron citar hoy al ministro.
El presidente del Senado, Jorge Pizarro, del Partido Demócrata Cristiano (PDC), también sostuvo que son muy graves las declaraciones de Otero, porque «nos van a traer problemas en América Latina por la sensibilidad que existe por el tema de los derechos humanos».
No bastan las explicaciones y creo que también es delicado que el canciller haya dicho que son opiniones personales», apuntó.
A su vez, el senador Juan Pablo Letelier, del Partido Socialista, calificó de «una vergüenza» la actitud de Otero y opinó que «se ha convertido en un embajador inútil».
Por su parte, el diputado Guillermo Teillier, presidente del Partido Comunista de Chile (PCCH), calificó las declaraciones de Otero como «una falta de respeto con quienes vivieron las atrocidades del gobierno militar» y opinó que el Presidente Piñera debe solicitarle la renuncia.
El exabrupto de este embajador, dejando entrever que está absolutamente de acuerdo con el golpe y con lo que hubo detrás, me parece inaceptable y somos muchas voces las que estamos pidiendo su salida», aseveró.
Respecto al canciller Moreno, Teillier, quien es miembro de la Comisión de Relaciones Exteriores, confirmó que el tema será planteado hoy y que también lo hará el diputado comunista Hugo Gutiérrez en la Comisión de Derechos Humanos, la cuál preside.
Adriana Muñoz, presidenta del Partido Por la Democracia (PPD), planteó la necesidad de que Moreno explique por qué, como autoridad de la República, se ha conformado con determinar que se trata de opiniones personales del embajador, «sin establecer que aquí se trata de un funcionario de Chile en un país extranjero».
A su vez, el jefe de la bancada de diputados de esa colectividad, Ramón Farías, sostuvo que es «impresentable el espaldarazo del Gobierno al embajador Otero, argumentando que estaba hablando a título personal y no a nombre de su cargo».
El subjefe de esa bancada, Tucapel Jiménez, criticó «la inconsecuencia del Gobierno que dice trazar una frontera entre lo que es esta opinión y lo que es el compromiso firme y decidido con el respeto a los derechos humanos».
El Presidente Sebastián Piñera nuevamente ha incumplido un compromiso de campaña, ya que él dijo que no iba a gobernar con gente que estuviera involucrada con la dictadura, y tenemos éste y otros casos que demuestran lo contrario», afirmó.
También, el jefe de bancada del Partido Radical Social Demócrata (PRSD), Marcos Espinosa, llamó a Otero a pedir disculpas públicas por sus dichos, a la vez que, entregue de manera voluntaria el cargo que ejerce en Argentina.
Recordó asimismo que, durante el régimen militar, «millones de chilenos debimos soportar, entre otras cosas, violaciones a los derechos humanos, destierro, muertes y una división que hasta ahora aún persiste en el país».
La Fundación José Domingo Cañas 1367, organización que rinde homenaje a las víctimas de ese centro ilegal de detención durante el régimen de Pinochet, dijo en un comunicado que Otero desconoció a «cientos de miles de exiliados, miles de muertos y otros tantos que sufrieron prisión política y tortura».