El Ministerio Público (MP) presentó las querellas contra esas personas, supuestamente participantes en los disturbios tras una movilización de rechazo a la enmienda constitucional que busca habilitar la figura de la reelección presidencial en Paraguay.
La institución llevará esos procesos a quienes acusa de ser parte de actos vandálicos cometidos, aunque la opinión generalizada es que se trató mayormente de individuos infiltrados entre los protestantes sin vínculo alguno con estos.
El Fiscal General, Javier Díaz, confirmó el número de imputados como resultado de las investigaciones aún en curso sobre los acontecimientos la noche del viernes y madrugada del sábado pasados ante la sede del órgano legislativo y el Microcentro.
Díaz dijo que continuarán las pesquisas y prometió transparencia y responsabilidad en las labores.
La manifestación fue reprimida por agentes antimotines de la Policía Nacional, a uno de los cuales el MP acusó por haber herido de gravedad al diputado liberal Édgar Acosta, quien recibió en el rostro una descarga de balines de goma.
Acosta fue intervenido quirúrgicamente primero aquí y después en Brasil, donde le espera otra operación para acabar de extirparle los perdigones aún alojados en la zona facial.
Confusa resulta todavía la situación de otro policía de quien se afirma fue el autor del disparo, esa vez con balines metálicos, que causó la muerte a un joven dirigente dentro de la sede del Partido Liberal Radical Auténtico.
La madrugada del sábado un grupo de antimotines irrumpió violentamente en el local de la principal organización opositora del país, cuya investigación prosigue por el MP en medio de versiones contradictorias.