Fue una estancia de unas horas, preparada con meses de antelación, que tuvo su precedente con el viaje de Temer a Buenos Aires en octubre del pasado año.
Pero en ese corto tiempo, acordaron avanzar en varios puntos, renovar los compromisos de luchar contra el narcotráfico y el crimen organizado y abrir el Mercosur, del que ahora Argentina lleva las riendas como presidente pro témpore.
‘La rivalidad la dejamos para el fútbol, en lo demás somos socios’, así expresó Macri a Temer tras dar a conocer una declaración conjunta y remarcó ‘tenemos que ser aliados en todos los sentidos’.
Acuerdos, sobre todo económicos entre ambos países, marcaron la agenda, teniendo en cuenta que Brasil es el principal socio comercial de Argentina, pero sobre todo los dos mandatarios resaltaron la intención de abrir el Mercosur al mundo.
‘Que el 2017 sea un año de inflexión positiva para el crecimiento, desarrollo y profundización de esta alianza estratégica, las relaciones del Mercosur con el mundo’, sostuvo Macri.
Asimismo consideró que existe ‘una enorme oportunidad’ de avanzar en acuerdos con la Unión Europea y con la Alianza del Pacífico a partir de la nueva situación política de los Estados Unidos y el proceso del ‘Brexit’.
‘Hoy tenemos que dar señales claras al mundo de que el Mercosur cobra nuevo ímpetu’, puntualizó Macri.
Argentina asumió en diciembre pasado la presidencia de ese bloque en una Reunión Extraordinaria del Consejo del Mercado Común a la cual no tuvo acceso Venezuela, que en ese entonces estaba en ejercicio del cargo y no pudo terminar su mandato tras ser suspendida bajo el argumento de incumplir con el Protocolo de Adhesión.
Desde entonces, el Gobierno de Macri ha dejado claramente abierta su intención de priorizar la negociación de un Tratado de Libre Comercio con la Unión Europea, que movimientos, organizaciones políticas y sociales consideran va contra el desarrollo y la integración regional.
Durante esta cumbre bilateral los dos gobernantes firmaron una carta dirigida al titular del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Luis Moreno, en la que le solicitan asistencia para establecer normas técnicas sanitarias y fitosanitarias con la posibilidad de crear una futura agencia binacional.
También hubo acuerdos de cooperación orientados a intensificar el desarrollo de las inversiones y las oportunidades de negocios, uno sobre defensa civil para ayudar a poblaciones fronterizas en situaciones de emergencia y otro en materia consular.
Por su parte Temer señaló que ambos países tienen ‘urgencia en el crecimiento económico y la generación de empleo, y también modos semejantes de enfrentar desafíos, como reformas ambiciosas y el fortalecimiento de la competitividad’ y agregó que coincidieron ‘en promover la eliminación de obstáculos para el comercio que persisten en el espacio del bloque’.
Macri y Temer, que analistas consideran son hoy protagonistas de un neoliberalismo renovado, afianzan su alianza y enfilan así con estos nuevos pasos sus estrategias para la llamada apertura económica.