Una pregunta a nivel nacional donde parece no haber consenso, y quizá se requiera de un estudio exhaustivo y científico, es sobre si ‘son pendejos o se hacen pendejos’.
Los cómplices de Enrique Peña Nieto (EPN) vociferan que “con los gasolinazos ganan en el largo plazo nuestros hijos”, “quienes ganan con los gasolinazos son los mexicanos”, que el aumento “sólo afecta a los que tienen carro”, que “esto no tiene nada que ver con la reforma energética”, que esto es un simple “impacto transitorio”…
Una de las mentiras que se han venido diciendo para limpiar la imagen de las mal llamadas reformas estructurales es de que ya no va a haber incrementos a los precios de necesidades básicas como la gasolina. “Gracias a la Reforma Hacendaria —se vanagloriaba EPN el 4 de enero del 2015—, por 1era. vez en 5 años, ya no habrá incrementos mensuales a los precios de la gasolina, diésel y gas LP”.
Quienes están al frente del Estado mexicano, una y otra vez, nos demuestran que son unos capitalistas fracasados. Hay 6 refinerías de crudo en México, mientras que en Estados Unidos, por ejemplo, hay 150 refinerías. Los ‘líderes del país’ dicen que no se construyen refinerías porque éstas “llevan mucho tiempo” construir y porque “cuestan mucho”. Si México refinara su petróleo, la ganancia del oro negro se multiplicaría, no habría por qué comprar combustibles del exterior, se crearían miles de empleos en ese sector y, en concreto, se podría hacer de México un país más que autosuficiente en materia energética.
Entre la tragicomedia, las mentiras y las sinvergüenzadas, hay cosas que los mexicanos sí saben. Lo que los mexicanos sí saben es que con el incremento en los precios de la gasolina aumentará todo lo que depende del combustible para poder moverse. Lo que sí saben es que en el sistema político-económico de un país entregado al capital monopolista mundial y secuestrado por unos cuantos mafiosos nacionales, todo aumenta menos el salario de las mayorías. Lo que sí saben es que la mal llamada reforma energética, se aprobó sin debate nacional y sin pedir opinión a la sociedad, esto para, primordialmente, entregar los recursos naturales de México a los extranjeros y a esa minoría que se creen amos de los mexicanos. Lo que sí saben es que con el actual modelo energético no se aprovecha el petróleo para bien del pueblo, lo que se hace es que se manda el petróleo crudo al exterior para luego, de forma torpe, importar gasolina. Lo que sí saben es que un país petrolero como México no tiene porque ser dependiente de otros para obtener dicho combustible. Lo que sí saben es que los que se benefician cada que se le propina un madrazo al pueblo son los multimillonarios, los políticos con conflictos de interés y las grandes compañías extranjeras. Lo que los mexicanos sí saben es que la sociedad está encabronada, incluyendo aquellos que suelen ser indiferentes frente al agravio contra los más débiles.
Por todo ello, auguramos que este 2017 es de resistencia y de organización, con miras a derrocarlos.