«Una cosa que puede hacer mucho daño en los medios de comunicación», que es «la desinformación».
VTV.-
8 de diciembre de 2016.- El Papa Francisco ofreció una entrevista al semanario católico belga ‘Tertio’, en la cual empleó duras palabras contra los medios de comunicación.
Según el Sumo Pontífice «los medios de comunicación tienen una responsabilidad muy grande», ya que hoy en día, «en sus manos está la posibilidad y la capacidad de formar opinión», no obstante «pueden formar una buena o mala opinión».
Para el líder de la Iglesia católica «los medios de comunicación son constructores de una sociedad. Por sí mismos, son para construir. Para intercambiar. Para fraternizar, para hacer pensar, para educar. En sí mismos son positivos».
Pero analizó que «como todos somos pecadores, también los medios pueden caer en hacer daño».
En ese aspecto enumeró cuatro tentaciones que pueden afectarlos: «calumnia, difamación, desinformación y la enfermedad de la coprofilia».
Los cuatro pecados de los medios
Francisco desarrolló cada una de estas ideas. Desde su perspectiva la calumnia implica «ensuciar a la gente» y se desarrolla, «sobre todo en el mundo de la política».
Asimismo, respecto a la difamación apuntó que «toda persona tiene derecho a la buena fama», pero quizás «en su vida anterior o hace 10 años tuvo un problema con la justicia, o un problema en su vida familiar… entonces, sacar a la luz hoy eso es grave, hace daño, se anula a una persona».
Uno de los puntos en los que hizo más hincapié fue en «una cosa que puede hacer mucho daño en los medios de comunicación», que es «la desinformación».
Para el Papa esto implica el hecho de que «frente a cualquier situación decir una parte de la verdad y no la otra. No. Eso es desinformar».
Desde su perspectiva, si al público «le das la mitad de la verdad», no está en condiciones de «hacer un juicio serio sobre la verdad completa».
«La desinformación es probablemente el daño más grande que puede hacer un medio. Porque orienta la opinión en una dirección, quitando la otra parte de la verdad», remató.
Finalmente instó a no caer «en la enfermedad de la coprofilia», es decir en «buscar siempre comunicar el escándalo, comunicar las cosas feas, aunque sean verdad». Como la gente «tiene tendencia a la coprofagia, se puede hacer mucho daño».