Cientos de funcionarios brasileños han participado en violentos enfrentamientos con las fuerzas policiales en una manifestación en Río de Janeiro contra las medidas de austeridad propuestas por el gobierno del estado.
Una multitud de trabajadores del sector civil marchó hacia la Asamblea de Río de Janeiro, lanzando granadas caseras contra el edificio, donde los legisladores se preparaban para votar esas nuevas medidas de la austeridad.
La policía usó balas de goma, botes de humo, granadas de destello y spray de pimienta para dispersar a la multitud.
Los enfrentamientos duraron casi cinco horas en varios lugares alrededor de la Asamblea. Testigos dijeron que en un momento durante los choques, agentes de policía entraron en una iglesia para disparar contra los manifestantes.
Un manifestante alegó que las fuerzas policiales estaban disparando contra la gente “indiscriminadamente”.
Los manifestantes llevaban pancartas con el eslogan “Temer Out” (Fuera Temer), refiriéndose al presidente brasileño Michel Temer. Asimismo prendieron fuego a diversos objetos en la calle.
La policía militar dijo en un comunicado que 11 oficiales resultaron heridos durante los enfrentamientos. Diversas informaciones señalaron que un número no especificado de manifestantes también habían sido heridos.
El gas lacrimógeno de la policía aparentemente entró también en la Asamblea. Los portales de noticias locales publicaron fotos de varios legisladores que llevaban máscaras médicas mientras estaban sentados en la cámara.