Patria Grande


Durante su intervención en la sesión solemne de la Asamblea Nacional, con motivo de la conmemoración del Bicentenario de nuestro primer grito independentista, el historiador y viceministro para el Fomento de la Economía Cultural, Pedro Calzadilla, invocó el pensamiento de nuestros más grandes próceres Francisco de Miranda y Simón Bolívar, en ese sueño latinoamericanista de formar la Gran Colombia.

«Una monumental intuición geopolítica inspiró sin descanso la voluntad de Francisco de Miranda, aquel primer venezolano latinoamericanista precursor e inspirador de las independencias de nuestra América», señaló.

Destacó que «era la certeza de que la revolución de independencia en nuestro continente debería ser total y unísona, que la América sometida por españa en el siglo XV debía liberarse de todos los yugos como un solo cuerpo, armado de todos sus miembros, como una sola respuesta coordinada ante una opresión que era la misma».

Asimismo, agregó que esta idea independentista se funda en un principio engendrado por los españoles, quienes dejaron a América como «una extendida nación común, no sólo por su idioma sino por la homogénea cultura, además de la resistencia y repulsión a un régimen que desde el comienzo se basó en la injusticia y el vasallaje».

Calzadilla, también Presidente del Centro Nacional de Historia, acotó que el ideal unificador de Simón Bolívar tenía un nombre, pues para él no debían existir diferencias políticas, militares y culturales, «sino una libertad común como fuerza, ese proyecto se llamó Colombia».

El historiador subrayó que en el pensamiento y la acción Bolivariana, «aquella unión frente a los males comunes deberá duplicarse de una unificación para la autosustentabilidad de la fuerza emancipatoria, así la Colombia de Bolívar no sólo se erigiría en una fuerza consistente capaz de su autodeterminación y autodefensa, sino en un factor necesario dentro de aquel principio geopolítico del Libertador».

Finalmente, expresó que a pesar de que la historiografía burgués refleja las luchas por la independencia y liberación de los pueblos latinoamericanos como resultado de las metrópolis, «la reinterpretación y apropiación táctica y estratégica que países como Bolivia, Ecuador y Venezuela han hecho de un instrumento político de origen liberal como es la Asamblea Constituyente, no es obstáculo para la innovadora empresa de transformar las estructuras del estado liberal tradicional».