Cory Doctorow
Boingboing
Los activistas de PublicACTA han estado reuniendo en Wellington, Nueva Zelanda (sede de la próxima ronda de negociaciones sobre el Acuerdo Comercial Antipiratería que se discute en secreto) para redactar una declaración sobre lo que debería decir el próximo acuerdo global sobre propiedad intelectual y cómo se debería negociar.
La «Declaración de Wellington» señala que los tratados de propiedad internacional de ámbito mundial no se deberían realizar a puerta cerrada y en salas neblinosas por el humo, sino a plena luz del día y con la participación pública en la Organización de Naciones Unidas, donde se suelen suscribir habitualmente los acuerdos sobre propiedad intelectual. La ONU reconoce y permite participar a organizaciones no gubernamentales, periodistas y representantes de países pobres, mientras que el ACTA solo abre sus puertas a países ricos y grupos de presión de empresas poderosas.
La Declaración afirma que los acuerdos sobre propiedad intelectual deberían preservar la flexibilidad para hacer usos no autorizados con fines relacionados con el interés público, desde la crítica hasta la educación; señala que las leyes de propiedad intelectual deberían proteger la privacidad y rechaza la máxima de que haya que espiar a todo el mundo por si quebranta la propiedad intelectual; que los servidores de páginas web y los motores de búsqueda deberían estar exentos de responsabilidad, en lugar de tener que encargarse de vigilar a sus usuarios; que la gestión de derechos digitales (DRM, Digital Rights Management) no forma parte de la propiedad intelectual y no se debería incluir en un acuerdo sobre la materia; que el acceso a Internet es un derecho humano y que desconectar a alguien de la red bajo la acusación de quebrantamiento de la ley es desproporcionado e injusto; y que los daños y perjuicios reclamados por las infracciones deberían ser razonables. Reclama que las sanciones penales por quebrantar la propiedad intelectual se circunscriban a los actos auténticamente delictivos, y no se aplique a la práctica ocasional de compartir archivos.
En resumen, la Declaración de Wellington reivindica un puñado de asuntos extremadamente sensatos que, si se implantaran, nos devolverían un mundo mucho mejor.
Esta noche están recogiendo firmas para la Declaración, y mañana por la mañana la presentarán ante los negociadores del ACTA cuando estos se sienten en Nueva Zelanda a trazar el futuro del mundo.
Yo la he firmado. Creo que todos deberíamos hacerlo.
Declaración de Wellington (¡Gracias, Nat , y gracias a todos los que la propusisteis!)
Actualización : La Quadrature Du Net tiene una ventana de aviso sobre el ACTA que se puede insertar en páginas web e informa a tus lectores sobre el ACTA y como detenerlo.
ACTA ES UNA AMENAZA PARA LOS DERECHOS FUNDAMENTALES Y EL ACCESO AL CONOCIMIENTO
Este Tratado Comercial Anti-Falsificación, negociado en secreto, podría:
* convertir a los operadores de Internet en policías privados del copyright
* imponer penas desproporcionadas e injustas para usuarios y consumidores
* dañar el acceso a medicinas y al conocimiento básico en países pobres
* obstaculizar la innovación
* establecer una forma anti-democrática de crear políticas públicas que ignoran a los Parlamentos y los Senados
¡Paremos el ACTA! Consigue una ventana similar a esta para tu página web
http://www.openacta.org/?p=325
Traducido para Rebelión por Ricardo García Pérez
Fuente: http://www.boingboing.net/2010/04/11/sign-the-publicacta.html