Agencias
San Juan, 19 de diciembre 2015.- El gobernador de Puerto Rico, Alejandro García Padilla, acusó al Congreso de EEUU de empujar a la isla caribeña al caos al negarse a tomar medidas para resolver la crisis fiscal.
“Al no actuar ahora, el Congreso (de EEUU) ha optado porque un Estado Libre Asociado de Estados Unidos deje de pagar sus obligaciones y entre en caos”, declaró el viernes Padilla, además de criticarlo por no acoger los reclamos para que aprobara medidas dirigidas a reajustar la situación fiscal de Puerto Rico.
Denunció también que el Congreso estadounidense está bajo el control de Wall Street, “Ese poder se materializa claramente en el análisis financiero de fundamentos de inversión de los fondos de cobertura y los fondos buitre que controlan nuestra democracia”, apuntó.
En este contexto, Padilla reveló que el Congreso, tras semanas de estar bajo la presión de Wall Street, negó lo que corresponde a Puerto Rico por el debido procedimiento de ley, a pesar de que no tendría ningún coste para los contribuyentes de la nación estadounidense.
Igualmente admitió que las Cámaras legislativas de EEUU rechazaron otorgar a la isla una moratoria contra demandas, lo que hubiera permitido al presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, originar un paquete de medidas que prometió para resolver la crisis financiera.
“Voy a tomar la declaración pública de Ryan como un compromiso de que el Congreso nos proveerá una solución antes de finales de marzo, solución que debe incluir la capacidad de reestructuración amplia e integral y un plan de crecimiento económico”, añadió el gobernador puertorriqueño.
El próximo 4 de enero, el Gobierno de Puerto Rico debe cumplir con el pago de 902 millones de dólares en el servicio de la deuda, por lo que la situación surgida puede inducirlo a un impago a los acreedores.
De acuerdo con analistas, la crisis económica de Puerto Rico, cuya deuda supera los 73 mil millones de dólares, tiene sus orígenes con el estatus político, debido a que la isla no tiene un modelo económico, no tiene poderes soberanos para controlar cabalmente su economía y tampoco capacidad para imprimir papel moneda.
EE.UU. invadió el actual territorio de Puerto Rico en 1898, prometiendo libertad y democracia al pueblo. Las promesas no se cumplieron y, aunque en 1952 se estableció una peculiar forma de administración denominada “Estado Libre Asociado”, Puerto Rico sigue colonizado y se espera que se anexe a EEUU en enero del 2021.