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Bogotá, 1° de marzo 2015.- Un reciente informe reveló las frecuentes fallas de aeronaves que han provocado la precipitación a tierra de numerosos aviones Kfir israelíes de la empresa IAI y Cessna A-37 Dragonfly, o Super Tweet, que forman parte de su flota aérea.

 

La flota de 24 aviones israelíes  IAI Kfir de la Fuerza Aérea Colombiana FAC, comenzaba una sistemática y constante carrera de fallas a partir del primer incidente ocurrido en la ciudad de Cartagena de Indias el 20 de julio de 2009, cuando el TC12 de matrícula FAC3004, se salía de la pista durante el aterrizaje, con resultado de pérdida total de la aeronave saliendo ilesos los dos pilotos de pruebas Israelíes (avión luego repuesto por IAI).

Kfir TC12 caído en base de Santa Elena de Opón, 2010

 

Continuaron en Santa Elena de Opón –departamento de Santander–, el 30 de septiembre de 2010, cuando el Kfir TC12 de matrícula FAC3005, cumpliendo una misión de observación y reconocimiento, fallaba y caía, pudiendo eyectarse sus dos tripulantes sin consecuencias fatales.

Nuevamente y en la base de Palanquero, el 27 de septiembre de 2013, el Kfir TC12 FAC3003, caía cumpliendo una misión de entrenamiento, resultando desafortunadamente sus dos tripulantes gravemente heridos.

El cuarto accidente se presentaba en Norcasia –departamento de Caldas–, el 18 de febrero de 2014, cuando el Kfir TC12 FAC3006, en ejercicio de una misión entrenamiento, caía, con el trágico resultado de la muerte del oficial instructor.

El quinto ocurría el pasado 31 de diciembre, con la caída del C10 FAC3041 durante la maniobra de aproximación a la pista del Comando Aéreo de Combate CACOM No.1, en la ciudad de Puerto Salgar, departamento de Cundinamarca.

En 2009, el entonces Ministro de la Defensa y actual presidente Juan Manuel Santos, firmaba un acuerdo con el gobierno Israelí para la compra de trece aviones Kfir y la modernización de once Kfir versión C7, que todavía operaba la FAC de un primer lote de trece adquiridos precisamente a Israel a través del programa Shibolet y modernizados en 1991 al mencionado estándar C7.

Para las nuevas adquisiciones, el gobierno colombiano comprometió cerca de 400 millones de dólares, que contemplaron la compra de las trece células (o fuselajes) y la modernización de las once aeronaves en servicio (160 millones), así como para dotarlos de misiles de rango medio con capacidad BVR (Derby), y de misiles de corto alcance WVR (Phyton 5), además de radares ELTA EL/M-2032 y EL/M-2001B, sistemas de guerra electrónica, bombas con kit de guía de precisión Spice 1000, kits Paveway 2 y otras inversiones, que deberán quedar ejecutadas totalmente para el presente 2015.

 


Cessna A-37B estadounidense

Los problemas se extienden además a la flota de Cessnas A-37, con incidentes que se remontan al 3 de agosto 2005, cuando en la maniobra de despegue uno de estos aviones presento fallas técnicas; el 17 de junio de 2009, se presentaba una avería en el sistema de aterrizaje de otro de estos aparatos, falla que se repetiría en otras unidades el 6 de abril del 2010 y luego el 1 de julio del 2012 durante el despegue, y que el 20 de abril del 2013 se presentaría en los sistemas hidráulicos de otro de estos aviones, y que nuevamente el 14 de junio de ese mismo año afectaría el tren de aterrizaje de otra más de estas aeronaves.

Un año después, el 24 de julio de 2014, dos pilotos de la FAC morirían, luego de que un incendio se presentara en la cabina del A-37 (el mismo de los problemas hidráulicos en abril del 2013), cuando se alistaba para un vuelo de entrenamiento.

Según el informe, las cifras son entonces claras: once incidentes desde el 2009, que involucraron diez aviones y que ocasionaron el sacrificio –innecesario– de tres pilotos.

 

Ejercicios Perú-Colombia con Cessnas y Super Tucanos

 

 

A finales del año 2014, las fuerzas aéreas de Colombia (FAC) y Perú (FAP), realizaron un ejercicio conjunto de interdicción Percol-III, como parte de la estrategia de aumentar el control sobre los espacios aéreos de los dos países.

 

Las maniobras tienen como centro operativo la Base de Santa Clara en Iquitos (Perú) y la ciudad de Leticia, en Colombia, y en ellos intervienen aeronaves Cessna A-37 Dragonfly de la FAP y Embraer A-29 Super Tucano de la FAC.

 

Según los participantes, los ejercicios buscan que ambas fuerzas aéreas planeen misiones conjuntas de detección e interceptación de aeronaves en vuelos ilegales, tratando de estandarizar procedimientos operacionales y maximizar así los medios de defensa aérea y la infraestructura aeronáutica con la que cuentan ambos países.

 

Las operaciones se realizan en ambos lados de la frontera, controlando de esta forma el tráfico ilegal de sustancias drogas, de armas y «otras mercancías». En ellas también intervinieron miembros de las Policías, Fiscalías y Ministerios del Interior y Público de las dos naciones.

 

Los ejercicios estuvieron encabezados por el comandante de Operaciones de la Fuerza Aérea del Perú, teniente general Julio Valdez Pomareda, y el jefe de Operaciones de la Fuerza Aérea de Colombia, brigadier general del Aire Carlos Eduardo Bueno Vargas.