Eldiario.com.ar
Paraná, Entre Ríos, 12-12-14.-Autoridades nacionales, provinciales y municipales participaron ayer al mediodía de la inauguración oficial de la 27° Cumbre Social del Mercosur, con el lema “Más participación social para profundizar nuestra integración”. En el salón principal de la Escuela Hogar Eva Perón, en la avenida Don Bosco 749 de Paraná, más de 500 asistentes –entre dirigentes e integrantes de organizaciones sociales del continente– participaron de los discursos de apertura y luego en las comisiones para el trabajo político. La reunión se desarrolla hasta hoy. En esta jornada se debatirá el temario para elaborar una propuesta en relación a la unión regional, en la previa a la Cumbre de Presidentes que tendrá a la capital provincial como sede la próxima semana.
En el acto de apertura, la intendenta Blanca Osuna dio la bienvenida como anfitriona y recordó que Paraná fue la capital de la Confederación Argentina, “lugar donde tuvo su formulación primera el Estado Nacional que hoy conocemos”. La jefa comunal sostuvo: “hemos trabajado mucho para que la ciudad quede hermosa y esté a punto”, y se excusó por si acaso “alguna cosa no da el resultado esperado”, aunque dijo que no por falta de amor en la preparación, sino por algún imponderable, aclaró. Entre las encendidas disertaciones de funcionarios y diputados nacionales en pos del Mercosur y el rumbo político de los países del cono sur, se hizo referencia en reiteradas oportunidades a la posible continuidad presidencial del gobernador Sergio Urribarri. El líder de la Federación de Tierra, Vivienda y Hábitat, Luis D’ Elia, por su parte, terminó su alocución recitando una estrofa poco difundida del Himno Nacional Argentino: “Se levanta a la faz de la Tierra / una nueva y gloriosa Nación / coronada su sien de laureles / y a sus plantas rendido un león. Viva el Mercosur”, concluyó entre aplausos. Además, hubo sentidos homenajes a Néstor Kirchner y Hugo Chávez, acompañados por los cantitos del público presente (ver aparte). En representación de las delegaciones extranjeras habló Federico Gomensoro, del Punto Focal Somos Mercosur de la República Oriental del Uruguay, quien recordó a José Gervasio Artigas y los fenómenos de integración históricos. “Si bien triunfaron los intereses del imperio, de las oligarquías, y nos balcanizaron, siempre es bueno mirarnos hacia atrás e imaginarnos recreando espacios de unidad, espacios de hermandad”, dijo el hombre que transitó por todas las cumbres, desde la primera hasta la actual, desde la época en que se las denominaba “contra-cumbres” pasando por el momento en que los gobiernos progresistas decidieron demostrar voluntad política de hacer frente a las demandas de las comunidades y proponer la construcción en común. El oriental hizo también referencia a Malvinas como un problema de todos los países de la zona, y pidió unidad para defenderse de los embates de “los buitres internacionales de las finanzas”.
Talleres. Los participantes, en su mayoría, llegaron desde las diversas regiones de nuestro país, además de unas 70 personas del resto de Sudamérica. Entre estos últimos, los brasileros y uruguayos son quienes despliegan las delegaciones más nutridas, con alrededor de 25 integrantes de cada país, seguidos por Bolivia, Paraguay y Venezuela, de donde arribaron entre 5 y 10 representantes. Después de las 15 horas comenzó el trabajo en los talleres de reflexión y debate político, en base a cuatro ejes: integración productiva y economía social; integración y ciudadanía regional; soberanía política, independencia económica e integración regional; y pensamiento y acción para la integración. Cada taller estuvo compuesto por cerca de 100 personas. Desde la organización del evento se propuso a alguien que se ocupe de dar comienzo formal, y luego, en el seno de cada debate, se eligieron los coordinadores y los “relatores”, que más tarde pasaron a informar sobre las resoluciones de lo discutido a la comisión redactora del documento final. El uso de la palabra, por lo general, no duraba más de 5 minutos para cada participante, y entre los mismos integrante de cada asamblea se iban regulando de forma natural. Algunas intervenciones fueron apasionadamente aplaudidas, y entre quienes hablaron no todos tenían prevista su participación de antemano. Las comisiones y los talleres son lo suficientemente abiertas como para que cualquiera vaya a escuchar e interesarse; es decir, no es necesario acreditar pertenencia a una organización social, si bien la mayoría de los presentes militan en alguna de las agrupaciones de Unidos y Organizados.
El embajador Lucas Serna, subsecretario de Relaciones Institucionales del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto, le explicó a EL DIARIO que quienes se anotaron con anterioridad se les envió documentos disparadores del debate. A partir de 2004, cuando los líderes regionales tomaron la decisión política de generar el programa Somos Mercosur, cada seis meses se reúne esta cumbre, que se organiza conjuntamente con la de presidentes. Dentro de la institucionalización del Mercosur, las cancillerías tienen puntos focales designados para el seguimiento de lo que se defina en estas reuniones. Pasada las 20, la discusión política quedó a un lado momentáneamente para dar lugar a la “Peña popular latinoamericana”, en el patio de la institución.
Dinámica
El embajador Oscar Laborde, Representante Especial para la Integración y la Participación Social y Coordinador del Consejo Consultivo de la Sociedad Civil de la Cancillería Argentina, explicó a esta Hoja cómo es el funcionamiento de la Cumbre Social y qué pasa con lo que allí se discute:
–¿Cómo es la forma de organización para los debates en la Cumbre Social?
–Tiene dos formas de trabajo para estos dos días: uno es en talleres, donde se conversan los temas más estratégicos (jueves). En ellos hay una reflexión general, política. Y luego funcionan las comisiones temáticas (hoy a la mañana). Se ha constituido una comisión redactora del documento final, que desde diciembre de 2012 participa en la reunión de presidentes, donde se les entregan las conclusiones, las reflexiones generales y las propuestas. Cada una de las cuatro comisiones hará cinco propuestas concretas.
–¿Existe espacio para la crítica en estos encuentros o es simplemente acompañamiento a la gestión?
–Nadie va a admitir la condición de no poder debatir o criticar. De hecho, vas a encontrar visiones críticas hacia los gobiernos, hacia la cumbre, hacia el proceso. Eso es natural y está muy bien. No podríamos ni queremos evitarlo. Hay un rol de los gobiernos y hay un rol de las organizaciones sociales: estas tienen que reclamar, tienen que manifestarse, pelearse, exigir, y también tienen que proponer. Los roles son diferentes, el gobierno tiene que equilibrar de acuerdo a la proporción de fuerzas que tiene en cada país, hasta donde le da a cada uno. Estaría mal si no se ejercen esos roles, si acá vendríamos y hay menos crítica que en la reunión de presidentes estamos en un problema. El fracaso sería si de los 400 participantes todos creen que está todo bien en cada uno de sus países, y además está todo bien en la región. Sería sospechoso, te diría.
–¿Cómo es trata ese documento en la Cumbre de Presidentes?
–Está claro que en el tema de las cumbres tiene mucho que ver lo gestual y lo simbólico, no es que le hacemos 5 propuestas y a los 6 meses tienen que rendir cuenta de qué es lo que sucedió con eso. Es más complejo el sistema de cómo prospera lo social: hay conquistas que se logran y son producto de la lucha de los pueblos aunque no hayan aparecido en ningún renglón de la Cumbre Social; y hay cosas que se repiten y no se pueden llevar a cabo. Pero no es mecánico, es un procedimiento complejo. Esto sirve para que los presidentes detectan el espíritu, y lo que quisimos hacer de diferente e incorporamos en esta cumbre son las propuestas concretas: cinco sobre cada tema, para que también les facilite a los presidentes las decisiones respecto a cuestiones prácticas.
PARA DESTACAR
Sigue hoy. Desde las 9 de comenzarán los trabajos sobre el eje de cuatro problemáticas en comisiones: derechos humanos; participación social; desarrollo sustentable y seguridad alimentaria; y comunicación social y nuevas tecnologías de la información. De cada una de ellas saldrán cinco propuestas concretas que serán elevadas a los presidentes. Luego del almuerzo se realizará el plenario con las conclusiones, la lectura de la Declaración de la Cumbre Social, y habrá un acto de cierre.