14 de agosto 2014.- “La mayoría de las dosis experimentales del ZMapp han ido a Liberia, pero no se puede realizar una distribución justa, para un tratamiento cuya escasez es tan grande”. Con estas declaraciones, la directora adjunta de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Marie-Paule Kieny, admitía que el medicamento no llegará a todas las personas infectadas.
Desde la OMS critican que no “ha habido inversión por parte de ningún gobierno” y aseguran que “es un fallo del mercado” que no haya llegado ningún medicamento hasta la fase de ensayo clínico.
En rueda de prensa, la OMS explicó ayer que daba su visto bueno a la utilización del medicamento experimental. “Teniendo en cuenta las circunstancias de la epidemia y siempre que se cumplan ciertas condiciones, el comité llegó a un consenso por considerar que es ético ofrecer tratamientos no aprobados cuya eficacia y efectos secundarios aún no se conocen, como un posible tratamiento o preventivo “, explicaron en un comunicado.
La OMS ha confirmado la muerte de 1.013 personas por la enfermedad y el contagio de otras 1.848. El mayor número de infecciones y muertes se están registrando en Liberia, Sierra Leona, Guinea Conakry y Nigeria. En Europa, el único fallecido es el religioso español.
El medicamento, agotado
Hasta el momento, únicamente se ha suministrado el tratamiento a tres personas: dos estadounidenses y el misionero español Miguel Pajares. Según confirmó la propia farmacéutica, Mapp Biopharmaceutical, el medicamento “Zmapp está agotado”. Desde el gobierno de Liberia reconocen que han contactado con la farmacéutica, que se ha comprometido a enviar al país africano los tratamientos que tienen disponibles.
Antes de ese fin de existencias, el tratamiento ha sido enviado a un país de África occidental. Desde la OMS recuerdan que ellos no tienen “ninguna responsabilidad en el envío de tratamiento alguno a los países porque no tenemos ningún tratamiento en reserva”.
Vacuna canadiense
Por otro lado, el gobierno canadiense ha anunciado que está desarrollando una vacuna contra el ébola que podría ser utilizada de forma masiva dentro de cuatro o seis meses. De hecho, ya se cuentan con cerca de 1.500 dosis que serán utilizadas en ensayos clínicos. Además, se han enviado diez dosis a la OMS y a Médicos Sin Fronteras.