Caracas, 9 de marzo de 2014.- Desde las instalaciones del Cuartel de la Montaña 4 de Febrero, el vicepresidente de la República, Jorge Arreaza, transmitió un Comunicado Oficial del Gobierno Bolivariano, en respuesta a las declaraciones emitidas por el vicepresidente de los Estados Unidos, Joe Biden, quién se refirió al presidente Constitucional de la República Bolivariana de Venezuela Nicolás Maduro, de inventar conspiraciones en contra de su país y definir la situación actual del país de alarmante.

 

El vicepresidente, aseveró que existe un complot internacional de gobiernos y medios de comunicación social, que pretenden desvirtuar los acontecimientos que se viven en Venezuela, colocándonos fuera de nuestras fronteras como un país en el que se violan los derechos humanos y existen enfrentamientos graves entre la ciudadanía.“Es bueno que el pueblo de Venezuela sepa que dentro de la conspiración internacional donde se ha querido generar la impresión de que en Venezuela hay una especie de guerra civil, de un enfrentamiento de pueblo contra pueblo, el gobierno de los Estados Unidos también ha sido parte”, dijo.

Arreaza manifestó, que las declaraciones de Biden fueron emitidas desde Chile, en la que el funcionario se encuentra en una visita oficial para asistir a la toma de posesión de la presidenta Michelle Bachelet.

A continuación respuesta del Gobierno Bolivariano al vicepresidente de los Estados Unidos de Norteamérica Joe Biden:

Comunicado

El Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, en nombre del pueblo y gobierno venezolano, rechaza de manera categórica las declaraciones emitidas por el Vicepresidente de los Estados Unidos, Joe Biden, por constituir un irrespeto a la soberanía venezolana y una agresión directa al pueblo que ha sufrido los embates de un sector fascista que avanza en una estrategia de golpe de estado continuado.

Esos sectores violentos, promovidos por el ala más radical de la derecha venezolana, son los confesos actores de los llamados a la desestabilización que reciben financiamiento de oficinas del gobierno de los Estados Unidos para atentar contra la tranquilidad del pueblo venezolano y lesionar una sólida democracia que ha recibido el respaldo popular en 18 elecciones durante los últimos 15 años.

El gobierno estadounidense también se ha unido a una conspiración mediática internacional que pretende generar una falsa imagen de guerra y represión generalizada en todo el territorio venezolano, cuando en realidad se trata de focos puntuales creados por los artífices de la violencia en contra del pueblo.
En sus declaraciones a un medio chileno, el vicepresidente norteamericano manifiesta su supuesta preocupación por la actuación de las fuerzas de seguridad del Estado para contener a los grupúsculos violentos de extrema derecha, razón por la cual nos preguntamos qué haría el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, si una organización política llama públicamente a su derrocamiento y comienza a ejercer acciones terroristas que irrespetan los Derechos Humanos y civiles del pueblo de los Estados Unidos.

El gobierno venezolano está plenamente seguro que si los organismos de seguridad enfrentaran los focos de desestabilización con la fuerza aplicada por la policía norteamericana, la cifra de víctimas fatales y heridos sería incalculable. Sin embargo, el respeto a la vida, el uso progresivo y diferenciado de la fuerza, y el compromiso por la paz, son los valores que mueven a la mayoría de hombres y mujeres que a diario resguardan el orden público en Venezuela.

Entretanto, mientras esos minúsculos grupos propician la violencia, el Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, ha hecho un llamado plural a todos los sectores del país para incorporarlos a una Conferencia de Paz, que ha contado con la amplia participación de empresarios, iglesias, organizaciones del poder popular y los sectores sociales más diversos que hacen vida en la nación, con el propósito de aislar a los fascistas que el gobierno norteamericano defiende, financia y apoya.

El gobierno norteamericano, nuevamente, se aísla en el Hemisferio y trata de reavivivar el monroísmo en la región, ante la contundente derrota sufrida recientemente en la Organización de Estados Americanos (OEA), donde se ratificó el respaldo que América Latina y el Caribe han dado a Venezuela, en reconocimiento a la vocación integracionista y soberana legada por el líder de la Revolución Bolivariana, Hugo Chávez.

El gobierno de Estados Unidos, principal promotor de la violencia a nivel mundial, experto en invasiones, bloqueos económicos, guerras iniciadas por intereses económicos sobre el supuesto de amenazas ficticias, creador de armas letales de destrucción masiva y responsable de la muerte de miles de civiles alrededor del mundo, no tiene moral para objetar el respeto a los Derechos Humanos en Venezuela y el esfuerzo del Gobierno Bolivariano por preservar la paz en nuestra nación.

Sin embargo, el gobierno venezolano reitera la clara voluntad de retomar y renovar las relaciones con el gobierno de los Estados Unidos de América, por medio de un diálogo directo y transparente, con base al respeto mutuo, la no injerencia en los asuntos internos y la cooperación necesaria, para lo cual ha decidido la designación de un nuevo embajador ante ese país.

El pueblo de Bolívar, el pueblo de Chávez, con su gesta histórica, luchará siempre por su mantener su independencia.

¡Venezuela se respeta!

¡Chávez vive, la Patria sigue!

Caracas, 09 de enero de 2014