Agencias-Matrizur.org

 

14-11-13. De acuerdo al anuncio realizado por el director de la agencia fiscal argentina, Ricardo Echegaray, la medida tiene como objetivo rastrear las direcciones de internet en donde se venden distintos tipos de productos e investigar dónde se entregan las mercaderías.

Tras el seguimiento, los controladores de la AFIP tendrán suficiente información para conocer si los locales funcionan en regla, si venden bienes que entraron por contrabando y si su situación fiscal está en regla.

En los últimos años el crecimiento del comercio electrónico fue exponencial en el país. Según datos de 2012, sumó $16.700 millones y marcó un salto de 539% desde el 2007. Se cree que al menos 10 millones de personas compraron alguna vez un producto por internet.

El «cepo» cambiario y las abrumadoras diferencias de precios volcaron a los consumidores a sitios extranjeros, principalmente de China, en donde se puede comprar de todo: desde cargadores para el celular hasta computadoras de última generación.

La clave de estas operaciones es el «free shipping» (envío gratuito) aunque incluso pagando algunos dólares por el servicio y sumándole el 20% de la AFIP las ofertas son muy tentadoras para los argentinos.

La fuga de dólares es una preocupación del Gobierno. El miércoles las reservas del Banco Central llegaron a un nivel de u$s32.598 millones, 20 mil millones menos del récord que se había obtenido en 2011 bajo esta misma gestión. Los principales canales de la sangría legal de dólares son: el déficit en la balanza energética, el turismo y las compras por internet.