Aníbal Arocha
La actuación política de Cristina Fernández en Argentina y Nicolás Maduro están poniendo en riesgo el proceso de unión e integración regional que nos conduce a la tan anhelada «Segunda Independencia» , esta vez del Imperio norteamericano.
Sin tener en cuenta el legado político e histórico dejado por Néstor Kirchner y Hugo Chávez, quienes fueron dos estrategas políticos de raza y quienes fueron esenciales en la derrota del ALCA, el proyecto de anexión de Latinoamérica y El Caribe más perversos y sofisticados de los últimos 200 años.
Sin embargo, los dones políticos no se heredan por ósmosis o cercanía de convivencia matrimonial o ministerial y tanto Cristina como Nicolás están dilapidando el legado político de sus mentores, dejando debilitado a todo el proceso de liberación nacional y regional impulsado por Néstor y Hugo.
Los sucesores y actuales president@s han cometido el peor de los errores electorales cual es impedir que las bases de los partidos electorales se expresen de forma democrática en elecciones internas donde los participantes de los espacios, organizaciones o partidos que conforman el frente defensor de la patria puedan expresar con su voto quienes serán los representantes en el parlamento, las gobernaciones o los municipios.
La utilización del dedo como método de selección de candidatos es una de las peores lacras de la democracia representativa que persiste en Argentina y Venezuela.
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