«Yo vengo a hablar de una revolución ética (…), si ustedes han decidido ser alcaldes, alcaldesas, concejales, tienen que estar preparados para salir empobrecidos de la alcaldía», conminó Morales, durante un mensaje emitido a sus seguidores en la ciudad de Cochabamba (centro), donde se reunió con aspirantes a alcaldes y concejales del MAS.
Morales dijo que estaba en la reunión no tanto para hablar de la campaña sino para hacer entender a los candidatos que no pueden aprovechar sus cargos para enriquecerse con la corrupción como, aseguró, lo establece una «herencia del Estado colonial», que consiste en que los candidatos a un puesto público se propongan mejorar su economía o tener autos de lujo, frente a lo cual les planteó como alternativa que deben empobrecerse en sus cargos.
El mandatario boliviano promueve una fuerte lucha contra la corrupción en su país a través de la designación de nuevas autoridades en las instituciones públicas. Una muestra de ello es el relevo del ministro de Minería y Metalurgia, Milton Gómez, a tan solo seis días de haberlo juramentado, por acusaciones de corrupción.
«Casi estaría seguro (que) un 10 ó 20 por ciento de ustedes es (partidario) del MAS, no tanto para servir en su municipio, en su alcaldía», reprochó el gobernante que, durante esta semana, acusó a sus partidarios de repartirse cargos en instituciones públicas; en particular en la Aduana Nacional de Bolivia.
«Yo no les echo la culpa a ustedes, es una herencia del Estado colonial», reafirmó el mandatario.
Morales, quien gobierna Bolivia desde 2006, inició su segundo mandato, que durará hasta enero de 2015, el pasado 22 de enero; luego de haber ganado las elecciones generales de diciembre pasado con un 64 por ciento de respaldo.
En los comicios del 4 de abril, los bolivianos votarán para elegir a los gobernadores de los nueve departamentos del país y a 337 alcaldes, además de concejales, autoridades regionales e indígenas