Agencias

Según el diario británico ‘The Telegraph’, la misma recomendación se habría realizado a Reino Unido.
El diplomático agregó que Moscú «tomó nota» de la propuesta y que actualmente estudia qué decisión tomar.
Al mismo tiempo, Samsónov subrayó que la situación en la capital norcoreana es de normalidad.
«No pasa nada extraordinario. La embajada trabaja en su régimen habitual», dijo.
Y añadió que en Pyongyang «no se observa ninguna manifestación de tensión» y que «no ocurre nada extraordinario, salvo que hoy es festivo».
La embajada rusa es junto a la británica, china y cubana una de las pocas misiones diplomáticas extranjeras acreditadas ante el régimen comunista norcoreano.
Rusia, que comparte apenas 20 kilómetros de frontera con Corea del Norte, considera inadmisible la decisión de Pyongyang de buscar vías para refrendar jurídicamente su estatus de país nuclear.
El portavoz del Ministerio ruso de Asuntos Exteriores, Alexandr Lukashévich, advirtió ayer de que declaraciones como ésa «complican gravemente, si no cierran prácticamente, las perspectivas de reanudación de la conversaciones a seis bandas para el arreglo del problema nuclear en la península de Corea».
El pasado 26 de marzo, Corea del Norte anunció que había puesto sus misiles y unidades de artillería «en posición de combate», con el punto de mira en Corea del Sur, así como en el territorio continental de EEUU y las bases militares del país norteamericano en el Pacífico.
Además, el 30 de marzo, Pyongyang declaró que «desde ahora, las relaciones Norte-Sur entrarán en estado de guerra».
