Asimismo, afirmó que el problema fue resuelto rápidamente y “no afectó las operaciones críticas de la Reserva Federal”, y declaró que la entidad se había puesto en contacto con todos los afectados por la filtración.
Los datos publicados el domingo por Anonymous incluían nombres de usuario, direcciones postales, números de teléfono laborales y móviles etc., aunque la Fed afirmó que entre la información difundida no se encontraban contraseñas.
Sin embargo, la admisión de la Reserva Federal sugiere que los ´hackers´ son capaces de poner en peligro los datos que se supone que están bien protegidos.
El sistema de la Reserva Federal está consciente de que se obtuvo información explotando una vulnerabilidad temporal en un producto de un proveedor de sitios web”
El ataque, anunciado por los ´hacktivistas´ a través de la cuenta en Twitter OpLastResort, se produjo en el marco de la operación Last Resort (Último Recurso), cuyo objetivo es reformar la Ley de Fraude y Abuso de Computadoras al amparo de la cual fue acusado Aaron Swartz, el conocido activista que abogaba por la libre información en la Red y que, tras un proceso que le dejó en la ruina, cayó en una profunda depresión y se suicidó el pasado 11 de enero.