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14 de noviembre de 2012.- Los acuerdos de compra de combustible a Venezuela son muy beneficiosos porque es el único proveedor que ofrece financiamiento y permite el intercambio por productos de alto valor agregado nacionales, afirmó el subsecretario Roberto Baratta, al desmentir un artículo del diario Clarín.

El Ministerio de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios de la Nación desmintió hoy irregularidades en la compra de combustibles a Venezuela, a través del subsecretario de Coordinación y Control de Gestión de Planificación, Roberto Baratta, quién sostuvo que los acuerdos por los cuales se compran combustibles a Venezuela “son muy beneficiosos para el país porque es el único proveedor que ofrece financiamiento y permite intercambiarlo por productos de alto valor agregado nacionales”.

 

Mediante un comunicado, el funcionario salió al cruce de una nota publicada hoy en el diario Clarín, en relación a un informe de la Auditoría General de la Nación (AGN) sobre pagos excesivos y falta de verificación en las importaciones de combustibles.

Baratta afirmó que “todas las adquisiciones se realizaron a valores de mercado” y de acuerdo a la normas y procedimientos vigentes” con el agregado de que no existe ningún proveedor que ofrezca esas condiciones de financiamiento, además de que los pagos se hacen en pesos y en nuestro país”.

En tal sentido, el subsecretario recordó que el 20 por ciento del combustible se paga a los 45 días y el resto en 12 cuotas con un interés del 2 por ciento y destacó que “con ese dinero después compran productos argentinos como cosechadoras, tractores, ascensores, semillas o biotecnología”.

«Basta con ver los números para comprender el impacto de los acuerdos, desde 2004 compramos combustibles por 5.200 millones de dólares, pero exportamos por 10.600, lo que arroja un saldo favorable para nuestro país de 5.100 millones de dólares, que significan más trabajo nacional, desarrollo tecnológico y valor agregado”», explicó Baratta.

Recordó que «en 2003 se importaba por 178 millones y se exportaba por 438, lo que significa que lo multiplicamos por cinco».   Asimismo, el funcionario ponderó que por la integración energética con Venezuela el país pudo ahorrar 1300 millones de dólares de haber tenido que utilizar otros combustibles.

Por otra parte, Baratta desmintió que exista falta de control en los subsidios al sector eléctrico y consideró que “al hablar de congelamiento de tarifas, el titular de la AGN se excede en sus funciones tomando partido en materia de política tarifaria dado que con su opinión busca llevar al alza los servicios energéticos que consumimos los argentinos”.