Agencias- Aporrea.org
Berlín, octubre 23 – Uno de cada cinco alemanes vive en condiciones de pobreza o está al borde de la marginalidad social, según datos difundidos hoy por la oficina federal de Estadística (DESTATIS).
De acuerdo con esta oficina, aproximadamente un 20 % de la población alemana no está en condiciones de pagar el alquiler ni otras cuentas, no puede permitirse al menos una comida completa cada dos días o irse de vacaciones.
Esta situación afecta a unos 16 millones de personas, es decir, aproximadamente una quinta parte de la población, y para establecer este cálculo se han tomado indicadores como el nivel de ingresos, el patrimonio y la propia percepción de los afectados.
El departamento de Estadística, con sede en Wiesbaden, establece el nivel de ingresos por debajo de los cuales se está amenazado de vivir en la pobreza o al borde de la marginalidad en 952 euros mensuales.
Los datos del citado departamento siguen a un reciente informe, elaborado por encargo del ministerio de Trabajo, que revelaba la creciente brecha social en Alemania.
De acuerdo con ese estudio, los alemanes ricos duplicaron su patrimonio en las últimas dos décadas y actualmente un 10 % de la población acumula más de la mitad del total de bienes patrimoniales del país -en 1998 el porcentaje se situaba en el 45 %-.
Paralelamente a ese progresivo enriquecimiento de la clase adinerada se alertaba de un incremento de la precariedad laboral y la pobreza.
Unos siete millones de alemanes trabajan en régimen de miniempleo y un 40 % de los trabajadores que lo hacen a jornada completa ha visto reducido su poder adquisitivo, a raíz de la llamada «progresión fría», que hace que un aumento salarial termine engullido por la inflación, sumada a un cambio de tarifa fiscal.
Ángela Merkel se ocupa también de enviar a la pobreza a los habitantes de otros países.