Autor: Cerigua 

6 de septiembre de 2012.- 6.5 millones de niños, niñas y adolescentes no van a la escuela y  15.6 millones acuden a clases en medio de fracasos y señales de  desigualdad que los rezagan al menos dos años y los hacen extremadamente  vulnerables.
La Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) reveló que más de 22 millones de niños, niñas y adolescentes en América Latina y el Caribe no asisten a la escuela o están en alto riesgo de abandonarla.
De acuerdo con un informe elaborado  por la UNESCO en coordinación con el Fondo de las Naciones Unidas para  la Infancia (UNICEF), en la región viven aproximadamente 117 millones de  personas menores de edad que reciben educación inicial, primaria o  secundaria básica, un dato positivo.
Sin embargo el documento destaca que  6.5 millones de infantes no van a la escuela y 15.6 millones acuden a  clases en medio de fracasos y señales de desigualdad que los rezagan al  menos dos años y los hacen extremadamente vulnerables.
En las últimas décadas los sistemas  educativos de la región se han ampliado y se han lanzado diversas  iniciativas para mejorar la calidad y equidad de la educación, así como  para hacer frente a la pobreza y a la desigualdad con el objetivo de  favorecer la inclusión social, según UNESCO y UNICEF.
Las entidades de Naciones Unidas  advirtieron que pese a los avances en materia de educación todavía  quedan muchos bolsones de exclusión que causan el ingreso tardío de  muchos niños y niñas al sistema educativo.
El estudio revela que aún existen  diversas brechas que propician situaciones de discriminación y fracasos  reiterados de las y los estudiantes que no encuentran las herramientas  pedagógicas para desarrollar sus capacidades.
El informe indica que mucha niñez y  adolescencia indígena, afrodescendiente, con alguna discapacidad o que  vive en las zonas rurales son poblaciones que están en mayor riesgo de  exclusión y rezago escolar.
Finalmente, el documento subraya que  los datos analizados demuestran que, en algunos países, la asistencia de  la población en edad de estar en la secundaria alcanza a menos del 50  por ciento en las zonas rurales, también se evidencian una clara  vinculación entre la condición del trabajo infantil y la asistencia a la  escuela.
