AFIP, un compañero de viaje
Autor: Página12 / Agencias
4 de septiembre de 2012.- La AFIP formalizó ayer, a través de una resolución publicada en el Boletín Oficial, la extensión a los pagos con tarjeta de débito en compras en el exterior y a las adquisiciones por Internet el régimen de percepción de un cargo adicional del 15 por ciento a cuenta de impuestos. Así, lo que hasta el viernes pasado era aplicable sólo a pagos con tarjetas de crédito o de compra, se hizo extensivo a todas las formas de pago electrónico. El cargo que cobrarán los bancos emisores será computado como pago a cuenta del impuesto a las Ganancias o de Bienes Personales.
El fisco informó, a través de una “fe de erratas”, que las personas que no están alcanzadas por Ganancias o Bienes Personales y realizan gastos fuera del país con sus plásticos deben recurrir a las dependencias de la DGI o comunicarse con un call center del organismo para reclamar el reintegro, aunque todavía no ofreció mayores precisiones sobre su implementación.
El titular del organismo recaudador, Ricardo Echegaray, anticipó ayer que AFIP utilizará la información sobre compra de bienes en el exterior a través de las tarjetas de crédito para controlar que los turistas declaren en la Aduana sus operaciones cuando regresan al país. Es decir, si ingresan bienes por valor superior a la franquicia vigente.
Después de identificar una cantidad significativa de individuos de alto poder adquisitivo que realizan varios viajes al año –aunque sus ingresos y bienes declarados no permiten explicar esos gastos fuera del país–, el organismo decidió comenzar a cobrar en forma anticipada y generalizada una parte del impuesto. Así, por cada 100 pesos que se consuman con tarjeta fuera del país, se efectúa un cargo de 15 pesos que será destinado al pago de esos tributos.
Al anunciar la medida, el jueves pasado, Echegaray destacó que por alcanzar solamente a las tarjetas de crédito, sólo afectaría a una pequeña parte de la población. “El 99,9 por ciento pagan Ganancias o Bienes Personales”, aseguró entonces. Sin embargo, 24 horas después se hizo extensivo el régimen a pagos con débito y compras por Internet. Según argumentaron a este diario desde el organismo recaudador, las medidas no se presentaron en forma conjunta ya que “la instrumentación del régimen de percepción al débito y compras por Internet era más compleja y requería más tiempo”.
“Todos los argentinos con situación fiscal transparente pueden vacacionar, trabajar, consumir y realizar eventos en cualquier lugar del mundo, siempre que sean compatibles con sus declaraciones juradas”, afirmó Echegaray. La decisión se suma a las distintas medidas aplicadas por el Gobierno para reducir la fuga de divisas. El titular de la AFIP sostuvo que el instrumento tiene fines recaudatorios y reconoció que desincentiva los consumos en el exterior. Además de mejorar la posibilidad de cobrar esos impuestos, en el organismo recaudador consideran que forzará a los individuos que evaden y fugan divisas a utilizar sus dólares guardados “abajo del colchón” o los llevará a comprar moneda extranjera en el mercado negro, donde deben pagar un sobreprecio en lugar de acceder al tipo de cambio oficial.
A través de una “fe de erratas”, el organismo recaudador agregó dos artículos a la resolución correspondiente a las tarjetas de crédito donde explica cómo reclamar la devolución del cargo cuando los individuos no sean alcanzados por Ganancias y Bienes Personales. Según afirma la AFIP, esos individuos pueden solicitar asistencia en las dependencias de la DGI, enviar un correo electrónico o comunicarse con el call center (0800-999-2347), que hasta ayer todavía no estaba operativo.
La medida alcanza a todos los residentes argentinos sin discriminar por su condición como contribuyente (autónomos, monotributistas o trabajadores en relación de dependencia). La AFIP adelantó ayer, además, que utilizará la información que suministrarán las empresas emisoras de las tarjetas para controlar que los turistas hayan declarado a la Aduana todas sus compras de bienes cuando regresan al país. En la actualidad sólo se puede entrar al país, sin declarar, mercaderías por la suma de 300 dólares y 150 dólares cuando se trata de un país del Mercosur. Durante una entrevista radial, Echegaray mencionó el caso de la “gente que va al exterior, compra ropa, le saca las etiquetas y quiere engañar a la Aduana. Ahora tenemos información más sofisticada, que nos permite ir más hacia el consumo detallado. Pagando el impuesto y siendo compatible su situación fiscal con lo que el ciudadano hace, no hay ningún problema”.