Los choques estallaron cuando la policía empezó a dispersar una manifestación de mineros declarados en huelga en una mina de platino de la compañía Lonmin, a unos 100 kilómetros de Johannesburgo.
Un portavoz de la policía comentó que las negociaciones con los sindicatos para poner fin a la huelga terminaron sin acuerdo y las autoridades no tuvieron otra salida que recurrir a la fuerza.
Los desórdenes en la mina comenzaron el domingo. De acuerdo a la compañía Lonmin, unos 3.000 mineros intentaron declararse en huelga y organizar una manifestación, después de lo cual estallaron disturbios.
El lunes pasado, los manifestantes lograron apoderarse de armas de fuego de la policía y los enfrentamientos adquirieron un carácter violento. Perdieron la vida dos agentes y uno resultó gravemente herido.
La situación en la mina se agravó, además, por un conflicto entre dos influyentes sindicatos sudafricanos. Uno de ellos, la Asociación de Trabajadores de la Minería y la Construcción (AMCU), decidió convocar una huelga, pero otro sindicato, la Unión Nacional de Mineros (NUM), no apoyó esta idea. Como consecuencia, los miembros de estos dos sindicatos están enemistados.