Hugo Carrera (*)

 

EL ingreso de Venezuela al MERCOSUR marca un punto de inflexión en el proceso histórico suramericano que adquiere una trascendencia de alcances difíciles de dimensionar.


Una serie de datos e indicadores económicos relacionados al nuevo mapa que se conformará, con el reciente acople bolivariano al bloque, nos dan idea de la magnitud económica de la incorporación:


· Mercosur tiene ahora 396 millones de habitantes

· Mercosur pasa a representar el 75% del Producto Bruto (3.635.000 millones de dólares) de esta región

· Mercosur posee las principales reservas de fuentes de agua dulce en el mundo.

· Mercosur es importante productor de alimentos

· Mercosur es la Quinta economía del mundo, sólo superado por Estados Unidos, China, India y Japón,

· Venezuela es un Importante poseedor de reservas de petróleo (1ra reserva mundial) y gas (5ta reserva mundial)

· Venezuela es importantísimo proveedor de inversiones

· Venezuela es importador de una diversidad de productos de origen industrial y agropecuario (importa el 70% de lo que consume, en su mayoría de Colombia y Estados Unidos)


Si bien los datos económicos y los análisis geoestratégicos son relevantes en el actual momento histórico de nuestra región, el análisis del impacto que va a producir el ingreso de Venezuela como miembro pleno del Mercado Comun del Sur merece una página especial en la “dimensión social”  del proceso de unión-integración no hegemónico, complementario y solidario: la “geopolítica social”.


Como bien sabemos, el “capital” y el “plusvalor” más valioso que puede aportar Venezuela al Mercosur, es la Energía Humana que proviene de la conciencia de su Pueblo y que difícilmente cuadre en posición arancelaria alguna, pero que ha sido el pilar fundamental en el que el gobierno del Comandante Hugo Chávez se apoya para enfrentar la desigualdad social que ha dejado la devastadora política de emirato petrolero en territorio venezolano creado por “cuartorepublicanismo adeco-copeyano”: sectores conservadores y de derecha venezolanos que obedecen a los poderes políticos y económicos estadounidenses y hundieron a millones en la pobreza y miseria, siendo el país potencialmente más rico -per cápita- de Suramérica.


Las amenazas de los quinta columnas, derecha endógena y burocratismo enquistados en el gobierno son los factores de poder que hacen más vulnerables a la Revolución, pues socava los cimientos sobre los cuales se construyó el ideario y la esencia del huracán bolivariano que se pondrá a test electoral en algunas semanas más.


Por ello, el próximo 7 de octubre se juega en Venezuela el destino del MERCOSUR: una derrota o un triunfo por poco margen desataría un movimiento desestabilizador de Venezuela y el bloque en su conjunto, que las oligarquías nativas y sus amos imperiales no tardarían en aprovechar, como lo hicieron en Honduras y Paraguay, pero también en Ecuador, Argentina, Bolivia, y en la propia Venezuela del 2002.

 

Por todo ello, el impacto de Venezuela en MERCOSUR puede sacudir al Mundo

 


Todos con Chávez!!!!!

 

(*) Asistente Social, estudiante de Ciencias Sociales