Según un informe publicado en el diario estadounidense ‘The Washington Post’, Leon Panetta intentó el domingo demostrar que EEUU y el régimen de Tel Aviv son aliados en lo que concierne al aumento de las sanciones internacionales contra Irán y no una intervención militar contra el país persa.
En alusión a la postura del régimen israelí respecto al programa nuclear iraní, sostuvo que “desde mi punto de vista, ellos no han tomado ninguna decisión concreta sobre Irán y creo que seguirán apoyando los esfuerzos internacionales que intentan presionar al gobierno de Teherán”.
Panetta insiste en que el aumento de las sanciones económicas contra Irán, debilitarán la voluntad del país persa en desarrollar su programa nuclear y hay que dar más tiempo para que tengan el éxito previsto.
“Las sanciones alcanzarán un nuevo nivel durante las próximas semanas y tan solo tienen un claro mensaje para los iraníes; que no pueden seguir con su programa nuclear como lo han hecho hasta hoy”, agregó.
Mientras la comunidad internacional insiste en que las sanciones contra Irán no tendrán mucho éxito, Panetta explicó que la única opción al tema nuclear iraní son los embargos económicos y las presiones diplomáticas contra Teherán para que las autoridades persas suspendan su programa nuclear.
El funcionario de EEUU hizo estas declaraciones antes de un periplo de una semana por el Oriente Medio y el norte de África.
Está previsto que el titular estadounidense entre este martes en los territorios ocupados, mientras que su compatriota el candidato republicano para las elecciones presidenciales de EE.UU. Mitt Romney efectuó una visita hace unos días a Tel Aviv en busca de apoyo de las autoridades israelíes para las elecciones del próximo 6 de noviembre y en la que afirmó que ese régimen merece un mejor tratamiento que el que recibió durante la presidencia de Barack Obama.
La visita del secretario de Defensa estadounidense se realiza como parte de la estrategia de Washington para asegurar y mantener su influencia en los países que últimamente fueron escenario de revoluciones populares contra regímenes que tradicionalmente servían a sus intereses.