Fraser fue consultado sobre el proceso de modernización de las fuerzas armadas en América del Sur, mencionó los casos de Brasil, Chile, Perú y Venezuela, pero solamente criticó a Caracas: “El proceso que más me preocupa es el de Venezuela, que está comprando grandes cantidades de fusiles. Han comprado 100.000 hoy, y están construyendo una fábrica para producir más”.
El alto funcionario militar estadounidense dijo con alusión a Venezuela: “Mi preocupación es que es fácil para estas armas llegar hasta los traficantes ilícitos. No tengo indicación de que eso suceda pero es una gran cantidad de armas que hay que monitorear”.
Fraser, uno de los promotores del uso de Colombia como una gran baser militar yanqui, y quien tendría la responsabilidad de dirigir las operaciones que allí se realicen, obvió deliberadamente que es precisamente Colombia el país que más porcentaje del presupuesto dedica al armamento y a la guerra y que además EEUU subsidia con miles de millones de dólares para adquirir material bélico.
El Jefe del Comando Sur participó en Asunción, en una sospechosa reunión con el comandante de las fuerzas militares paraguayas, en un contexto de amenazas de golpe de estado contra el legítimo Presidente, Fernando Lugo.