“(Obama) admitió el uso de la fuerza mientras defiende un mundo sin armas nucleares, por lo que su diálogo es contradictorio”, dijo Kazushi Kaneko, de 84 años y director general de la organización de afectados por las bombas atómicas en el ayuntamiento de la ciudad japonesa de Hiroshima.
Durante su discurso en Oslo, el mandatario defendió la lucha en guerras “necesarias” así como su reciente decisión de aumentar el despliegue en la guerra en Afganistán.
Apenas unos meses después de su investidura, Obama lanzó en Praga una iniciativa para eliminar en un futuro los arsenales nucleares existentes en el mundo, 64 años después de que Estados Unidos lanzara dos bombas atómicas sobre las ciudades niponas de Hiroshima y Nagasaki a finales de la II Guerra Mundial.
Hideo Tsuchiyama, ex rector de la Universidad de Nagasaki y experto en políticas para la reducción del armamento nuclear, fue otro de los que criticó desde Japón hoy las palabras de Obama.
“Percibí la intención del presidente por poner excusas al despliegue de más tropas a Afganistán”, dijo Tsuchiyama, aunque elogió a Obama por su declaración para buscar un mundo sin armamento nuclear.