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26 junio 2012 – El depuesto presidente de la República de Paraguay, Fernando Lugo, comentó este martes que los Obispos representantes de la iglesia Católica le solicitaron que aceptara la renunciar a la máxima magistratura de su país, a cambio de no ser imputado.

“Los Obispos me ofrecieron un canje. Si yo aceptaba renunciar no me iban a imputar”. A lo que el líder paraguayo le respondió: “Ustedes se han equivocado de lugar Obispos. Acepto el juicio”.

Así lo afirmó Lugo en una entrevista exclusiva con TeleSUR, retransmitida por Venezolana de Televisión (VTV).

Dijo que aceptó ir al juicio para evitar hechos de violencia. “Este presidente esta en contra de la violencia, no cree en la violencia”, insistió.

En cuanto a las multitudinarias manifestaciones pacíficas que se dan en estos momentos en las calles paraguayas en respaldo al depuesto mandatario, éste aseguró que la resistencia es una trinchera por la democracia, y que si los que en este momento ostentan el poder se les ocurriera reprimir, eso sería una “desinteligencia”.

“Esos jóvenes, estudiantes, hombres y mujeres que están en las calles, están ganados a un espacio privilegiado en la sociedad paraguaya. Que crezcan, que se vayan a otras provincias, (las manifestaciones pacíficas). Esto se ha convertido en una escuela del rol de los ciudadanos en la sociedad paraguaya”, apuntó.

En referencia al papel de los medios de comunicación, Lugo acotó que éstos no pueden decir que en Paraguay no ha pasado nada. Por ello, adelantó que en la nación guaraní hay muchos lugares donde no llega la televisión ni la prensa, lo que lo motiva a recorrer todo el país para explicar lo que ha ocurrido, en lo que el jefe de Estado destyituido denomino “el viernes negro para la democracia en Paraguay”.

Finalmente, añadió que en todas partes están naciendo iniciativas de resistencia, de protestas y descontento generalizado. “Me reconocen como líder y quiero estar con ellos. Una democracia participativa y protagónica es la única que puede garantizar un proceso democrático en Paraguay”, concluyó Fernando Lugo.