Autor: Nicolas Lantos / Página12

 

3 de mayo de 2012.- La Presidenta inauguró el patio Islas Malvinas en la Casa Rosada. Defendió a la embajadora Alicia Castro por sus preguntas al canciller británico y consideró “un crimen de guerra” el hundimiento del crucero General Belgrano.

Teléfono para Londres: “Es insostenible en cualquier parte la negativa al diálogo. ¿Cómo alguien puede decirse demócrata y decir de eso yo no hablo?”, sostuvo Cristina Fernández de Kirchner al inaugurar ayer un patio de la Casa Rosada, al que se bautizó Islas Malvinas, y que homenajeará a los caídos en el crucero General Belgrano, de cuyo hundimiento (que la Presidenta calificó como “un crimen de guerra”) se cumplieron ayer 30 años.

 

En el breve acto, CFK reivindicó a la embajadora en el Reino Unido, Alicia Castro, que un día antes le había preguntado al canciller británico, William Hague, sobre la apertura de un diálogo por las islas, y anticipó el rol que tendrá Argentina desde el año próximo como miembro del Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas, al sostener que “debe exigirse que se respeten las resoluciones” de ese organismo. “Somos y seremos siempre un país de paz porque siempre fuimos un país de paz”, insistió la mandataria, al descartar otra solución al problema del archipiélago que no sea a través del diálogo.

“Quiero reivindicar la actitud de la embajadora, que le preguntó democráticamente al canciller cuándo iban a dialogar y cumplir las resoluciones de las Naciones Unidas”, apoyó la Presidenta a la representante diplomática en Gran Bretaña, cuando –luego de que se difundiera la noticia del intercambio verbal en Londres– algunos medios locales cuestionaron los términos en los que Castro se dirigió a Hague. “El canciller se molestó y es hasta lógico –dijo la Presidenta–, pero lo que no me parece lógico es que se hayan molestado algunos argentinos, como he leído en los medios.”

La Presidenta señaló que “a veces el odio nubla la razón y el decoro”, respecto de quienes desde editoriales de la prensa opositora señalaron que la embajadora “no respetó las formas diplomáticas”, al aprovechar su turno en una ronda de preguntas y respuestas con el encargado de las Relaciones Exteriores británicas para consultarlo sobre el tema Malvinas. “Deberíamos repensar el concepto de formas diplomáticas que se tiene en este país. En el resto del mundo existe la defensa irrestricta de sus derechos por sobre toda otra cuestión”, señaló la jefa de Estado.

El patio Malvinas Argentinas de la Casa Rosada había sido utilizado durante años para ubicar “cubículos” donde trabajaba “la burocracia”, recordó ayer CFK al reinaugurarlo y bautizarlo. Ahora hay una fuente (que ayer se encontraba apagada para evitar que se mojaran los invitados) y un pequeño espacio verde rodeado de baldosones blancos con guardas coloradas. En el cielo, unas pocas estrellas se acomodaban en el cuadriculado de una malla que cruza el espacio de punta a punta por razones de seguridad. En los balcones que rodean el pequeño jardín, un puñado de militantes cantaba las canciones de siempre, sus voces amplificadas por el rebote que la inusual acústica del lugar les imprimía.

Los cantos redoblaron cuando ella recordó a Willy, el militante santacruceño de 23 años que murió la semana pasada en una ruta, en Chubut, mientras viajaba hacia Buenos Aires para el acto que se celebró en el estadio de Vélez. “Aquellos jóvenes fueron convocados para ir a la guerra –señaló en relación con los caídos en el Belgrano–. Me siento muy feliz de ser parte de un gobierno que ha sabido convocar a los jóvenes a participar con alegría de la construcción de una Argentina mejor.”

La Presidenta además ya parece haber asumido el rol que ocupará el país desde el año que viene como miembro no permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU y anticipó una posición crítica hacia el statu quo de ese organismo. “Las Naciones Unidas deberían replantear su rol acerca de si son un encuentro que se realiza en Nueva York todos los años” o si se plantean como el instrumento para “un mundo más justo y más sensato”. También señaló: “Se debe exigir que sean cumplidas sus resoluciones”.

“Los países con poder deberían replantearse seguir con políticas que llevan al fracaso económico, de la seguridad internacional, del narcotráfico, sin posiciones dogmáticas –desafió CFK–. Nosotros creemos en los pilares básicos de la democracia y del derecho internacional. Desde este lugar decimos que vamos a seguir trabajando duro, en todos los foros democráticos para seguir logrando consensos y hablar de diálogo.”

Por último, CFK relató que parlamentarios ingleses realizaron un informe sobre las circunstancias del hundimiento del crucero General Belgrano fuera de la zona de guerra hace 30 años y anunció que dará instrucciones a la Cancillería para “analizar la presentación de lo que constituyó un crimen de guerra”. En la Casa Rosada no descartaron, ante la consulta de Página/12, que se inicien acciones legales en tribunales internacionales, como hoy le pedirán a la Presidenta sobrevivientes y familiares de los caídos en el ataque. “No vamos a bajar la voz y no nos vamos a callar en ninguna parte del mundo –concluyó CFK–. La nuestra es sólo la fuerza de la palabra, la razón y la justicia frente a la de la guerra y la de las armas.”