Protesta contra ACTA, la SOPA europea
Autor: Agencias

Madrid – Una  vez suspendida la tramitación de la nueva legislación antipiratería en  EEUU, organizaciones y activistas han puesto en su punto de mira otro  acuerdo similar: ACTA. Las siglas corresponden a un acuerdo  antifalsificaciones suscrito por ocho potencias comerciales  internacionales y la Unión Europea que fue firmado por varios de sus  miembros ayer en Tokio. Entre ellos están EEUU, Japón o Corea del Sur.  Sus defensores aseguran que es una pieza clave en la lucha contra las  falsificaciones y la copia de productos con copyright.Sus oponentes  denuncian que puede convertir a las empresas que ofrecen conexión a  internet en una policía de la red que sea responsable de las violaciones  de la propiedad intelectual de sus clientes.
Para que la UE  ratifique el acuerdo falta un último pero crucial paso: el voto a favor  del Parlamento Europeo. Se espera que el voto definitivo se produzca en  mayo o en junio. Como protesta ante la posibilidad de que se apruebe, la  web de la institución fue ayer atacada por activistas. Una nota interna  describió un «ataque externo del grupo Anonymous hackers como  represalia al cierre de Megaupload y la firma del Tratado ACTA». La  página permaneció inaccesible durante un tiempo por la mañana, pero un  portavoz aseguró que el ataque no logró penetrar en la estructura  interna de la web.
Más voces críticas
En países como Polonia, miles de personas se han manifestado para  que no entre en vigor el acuerdo, considerado como un hermano gemelo de  la SOPA americana. «En los últimos días hemos visto protestas  esperanzadoras en Polonia y otros países de la UE. Estamos preocupados  por el efecto de ACTA en la libertad de expresión o acceso a las  medicinas, pero también a la cultura y al conocimiento», aseguró Jérémie  Zimmermann, portavoz de la organización La Quadrature du Net. Según él,  el acuerdo está redactado en relación a «los intereses empresariales» y  puede poner en peligro la fabricación de medicamentos genéricos.
La Comisión Europea, gran defensora del acuerdo, sigue con preocupación los ataques y las críticas. «ACTA debería discutirse abiertamente, pero no afectará a la manera en la que tratamos las descargas», aseguró ayer Ryan Heath, portavoz comunitario de Agenda Digital, la comisaría a cargo del sector de las telecomunicaciones.a cargo del sector de las telecomunicaciones.
