AFP Tokio
El gobierno de Japón presentó hoy un nuevo calendario del desmantelamiento de la accidentada central nuclear de Fukushima, con una previsión de trabajos durante 40 años dado el estado desastroso del lugar y las nuevas técnicas que serán necesarias.

“El trabajo se hará en varias etapas”, dijo Goshi Hosono, ministro del Medio Ambiente y responsable por el proyecto, durante una conferencia de prensa.

La retirada del combustible utilizado en las piscinas de desactivación debería comenzar en los próximos dos años (en el reactor 4), y tomará varios años hasta que ese proceso sea terminado.

Durante ese período serán igualmente reforzados los sistemas de refrigeración para los reactores y piscinas, así como diversas instalaciones más.

La extracción del combustible fundido en los reactores 1 a 3 comenzará solamente dentro de 10 años, y el proceso tardará dos décadas, adelantó el nuevo cronograma oficial.

En tanto, el tratamiento de las aguas contaminadas acumuladas en el lugar y momentáneamente almacenada en los depósitos deberá estar finalizado en ese mismo período.

Hosono destacó que para cada una de esas tareas, nuevas técnicas serán necesarias, ya que la situación de Fukushima es inédita, con edificios destruidos, nivel elevado de radiactividad y combustible que cayó total o parcialmente sobre los depósitos de concreto de tres de los seis reactores del complejo.

“La recuperación de los restos del combustible será sumamente difícil. Eso exigirá medios técnicos muy particulares, y sin robots esa operación será imposible”, comentó por su parte el director adjunto de la empresa de energía eléctrica de Tokio, Tepco, en otra conferencia de prensa.

“Vamos a trabajar con empresas japonesas y extranjeras”, prometió otro responsable de Tepco.

“De hecho, es deseable fomentar la cooperación internacional, porque Estados Unidos, Francia y otros países están listos para ayudar a los japoneses en esta operación, que es muy delicada”, dijo a la AFP un experto francés del sector nuclear.

“En un primer momento, será necesario desarrollar los equipos y los dispositivos que permitan conocer realmente el estado en que se encuentra el combustible, antes de cualquier otra cosa”, añadió la fuente.

Un grupo especial de investigación y desarrollo deberá estudiar rápidamente las necesidades que se presentan.

El desmantelamiento de las instalaciones, arrasadas por un terremoto y un maremoto el 11 de marzo, no estará completo en menos de 40 años.

“Debemos llevar adelante estos trabajos y evitar crear nuevos riesgos”, insistió por su parte el ministro de Industria, Yukio Edano.

“Hemos definido a cada etapa los criterios decisivos para la continuidad de los trabajos, los elementos más importantes para el avance del calendario”, dijo Hosono.

El gobierno japonés decretó el pasado viernes el apagado en frío de los reactores nucleares accidentados en la central de Fukushima, una etapa importante que marca la estabilización del sitio y abre el período de preparación del desmantelamiento.

Paralelamente al desmantelamiento progresivo, las autoridades se ocuparán de las zonas contaminadas y la población evacuada.